Por: Eugenio Astudillo Leal
El año 1981, mediante Decreto Ley 732 del Ministerio del Interior, se dio vida legal a la celebración del “Día Nacional de la Operadora Telefónica” en homenaje a la señorita Luisa Acosta, operadora de la entonces Compañía Telefónica en Valparaíso, que durante el gran terremoto del año 1906 en ese primer puerto de Chile, trabajó sin descanso, por varios días, para no dejar incomunicada a la población del lugar ante esa gran tragedia.
El 01 de Junio del año 1961 ella cumplió 50 años de servicios en la profesión de operadora en la misma empresa telefónica, quien destacó y premió sus servicios, y desde entonces, internamente, se conmemoró ese día, en todas las centrales de teléfonos del país, como el Día de la Operadora, dando motivo a grandes celebraciones laborales.
Cabe recordar que en esas décadas del siglo pasado las centrales telefónicas se ubicaban en cada pueblo o ciudad de cierta envergadura, en las cuales, habían a los menos 7 señoritas que atendían manualmente las comunicaciones locales y de larga distancia de su alrededor inmediato, eso hacía que la cercanía de ellas a la comunidad fuera cada día mas estrecha.
La entonces llamada Gerencia Zonal de Los Andes de la Compañía de Teléfonos de Chile, agrupaba entro de su territorio jurisdiccional a centrales tan importante como San Felipe, Putaendo, Santa María, Panquehue, Catemu, Llay llay, Curimón y el propio Los Andes. En su momento de mayor desarrollo telefónico con la antigua tecnología existente, que consistía en llamar a la central y desde ahí se comunicaba en forma manual, vía operadora, con el destinatario, la empresa de telecomunicaciones llegó a contar en esta zona con más de 100 operadoras activas.
La central de trafico instalada en el edificio CTC de la ciudad de San Felipe, fue el último bastión en estas dos provincias, que perduró por más tiempo ante la embestida de la nueva tecnología comunicacional, la que en vez de comunicar mejor a la gente, hoy incomunica a todos con la realidad de su entorno más cercano, por la nefasta obsesión del permanente uso de los aparatos celulares en actividades familiares y de sus grupos.
Antiguamente era diferente. La dulce voz de la operadora era el nexo primordial que preparaba una conversación amena con el destinatario. Ella estaba atenta en emergencias, en temporales, en estados de soledad y otras preocupaciones. Bastaba levantar el teléfono y ahí estaba la encantadora voz de la Operadora Telefónica, que invitaba pedir con seguridad y confianza la necesidad de comunicación.
Hoy, pasado ya el tiempo y la tecnología, aun en algunos servicios públicos y privados se celebra este Día de la Operadoras. Los demás, en general, los más antiguos como yo, hacen recuerdos de esos preciosos días en que cálidas voces de otrora, cursaban nuestras llamadas telefónicas. ¡Que hermosos recuerdos!.
Hoy, primero de Junio del 2017, al mediodía, en un céntrico restorán de la ciudad de San Felipe, un importante grupo de ex Operadoras de la Compañía de Teléfonos de Chile, de la ex Gerencia Zonal de Los Andes, todas ya retiradas de la función, se reunirán, como todos los años, a recordar esos días, en que con todo cariño y dedicación servían las comunicaciones de las provincias de Los Andes y San Felipe.
FELICIDADES CHIQUILLAS.