La Fiscalía de Los Andes siempre sostuvo que hubo dolo y el ánimo de matar”, recalcó el fiscal Basso
Una alta sentencia obtuvo la Fiscalía de Los Andes para el sujeto que fuera acusado de dar muerte con un disparo en el pecho a Juan Francisco Osorio Anjarí, de 59 años, y herir en el muslo derecho al percutar en dos ocasiones la misma arma de fuego (un revólver calibre 32 marca Rossi) en contra del hijo de la víctima mortal J.O.M., de 33 años, hecho ocurrido alrededor de las 19:30 horas del domingo 5 de octubre de 2014 en la cancha del Club Independiente de Lo Calvo, comuna de San Esteban, luego que el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de esta ciudad decidiera condenar en forma unánime a Francisco Javier Brito Espinoza, 27 años, a la pena única de 17 años de presidio mayor en su grado máximo, más accesorias legales, como autor de los delitos de homicidio simple consumado y de homicidio simple frustrado.
Así se conoció en la audiencia de comunicación de la sentencia a la que arribaron las magistrados Alessandra Tubino Tassara, Daniela Torres Flores y Catalina Lagos Gómez, luego de desarrollarse el juicio oral desde el lunes 12 al jueves 15 del presente mes.
De igual modo, el ahora condenado también fue sentenciado a 541 días de presidio menor en su grado medio, más accesorias legales, como autor del delito de porte ilegal de arma de fuego, previsto y sancionado en la Ley N° 17.798 sobre control de armas.
PRIVADO DE LIBERTAD Y ADN
La jueza Daniela Torres, que redactó y dio lectura resumida del fallo, hizo presente que dada la extensión de las penas impuestas el sentenciado deberá cumplirlas de manera efectiva, comenzando por la más grave y sin solución de continuidad, la que se contará desde el mismo 5 de octubre de 2014, fecha desde la cual y tras la formalización permanecía ininterrumpidamente privado de libertad por esta causa, contando a la fecha con un abono total de 807 días.
Asimismo, se dispuso la toma de muestras biológicas al sentenciado para que sean incluidas en el registro de condenados, de lo cual se oficiará al Servicio Médico Legal que está a cargo del ingreso de la información al Sistema Nacional de Registro de ADN.
También se decretó el comiso de los elementos utilizados en la comisión del ilícito.
23 AÑOS HABÍA PEDIDO EL MINISTERIO PÚBLICO
Cabe hacer presente que el Ministerio Público había solicitado la aplicación de las penas efectivas de 13 años de presidio mayor en su grado medio por el delito de homicidio simple consumado, 7 años de presidio mayor en su grado mínimo por el homicidio frustrado y 3 años de presidio menor en su grado medio por la tenencia ilegal de arma de fuego y municiones.
JUSTICIA PARA LA FAMILIA DE LAS VÍCTIMAS
El fiscal de la causa, Osvaldo Basso Cerda, al referirse a esta condena, indicó que si bien había hecho la petición por un total de 23 años de cárcel, destacó que de igual modo se logró una alta pena para el autor de este crimen y quien también ocasión una lesión grave, que se ajusta a los rangos esperados y con lo que se hace justicia para la familia de las víctimas.
Señaló que el Ministerio Público sustentó su acusación “en pruebas de carácter testimonial, testigos que decidieron colaborar, asistiendo a la Fiscalía a declarar y venir al tribunal a persistir en sus relatos; prueba pericial, donde varios peritos declararon como del Servicio Médico Legal, del Lacrim de la PDI Valparaíso, peritajes de ADN y balísticos; además, prueba documental que acompañamos relativo a que no tenía permiso para portar arma y otros que dicen relación con la Ley sobre Control de Armas, junto a fotografías que exhibimos durante el juicio”.
Agregó que “la Fiscalía de Los Andes siempre sostuvo que hubo dolo y el ánimo de matar, lo que fue acogido en definitiva por el tribunal”.