Por:Luis F. González Reyes, Presidente Centro De Estudios Para Asuntos Docentes, Cepad Los Andes.
Ha cambiado su folio el Diario El Andino, al cumplirse ya 40 años de existencia, ingresa a una segunda mocedad, dado que conserva el ímpetu juvenil, además de la experiencia que con 40 años le otorga plena madurez.
El Andino ha practicado un periodismo sano, veraz, ajustado a los hechos, sin estridencias y alejado de cualquier bandería política e ideológica; prueba de lo anterior es el hecho que prácticamente no han existido instancias, en que alguna noticia propagada mediante sus páginas, haya tenido que ser desmentida; ello tiene un enorme valor agregado puesto que el periodismo de hoy constituye una fuente importante para la historia del mañana –o dicho en otros términos- gran parte de lo que es historia fue en algún momento divulgado en algún medio de prensa o texto; consciente de ello, la edición de El Andino es remitida tanto a la Biblioteca Nacional, como a la Severín en Valparaíso, y asimismo a la Biblioteca local; porque allí es seguramente donde los historiadores del futuro concurrirán a escrutar en sus páginas los hechos que un día fueron del presente.
El profesor de periodismo y ex Director del Diario La Nación, Ramón Cortez P., señalaba que siempre el periodismo es adjetivo del medio social, por tanto, es una actividad que no puede existir sin el grupo humano, sin la comunidad de la cual informa y al mismo tiempo forma parte; los periódicos en este sentido solo se constituyen en un espejo de la comunidad, las gentes nos acostumbramos a mirarnos en ellos todos los días, una sociedad sin medios de comunicación es como si viviese permanentemente en penumbras, cuanto más que lo que no se publica y divulga es como no existiese.
Pero, además de los hechos cotidianos, El Andino ha tenido la visión en manos de su Director Luis Ríos Muñoz –hijo del terruño- de luchar por causas propias de la andinidad, así por ejemplo, para que Los Andes fuese considerada provincia; logro que hasta el día de hoy es valioso, más aun si se considera que se vive ahogado y asfixiado por un doble centralismo; uno externo de Santiago, la capital, y otro interno, el de Valparaíso. Para mantener vigente el espíritu que como comunidad nos anima, El Andino publica opiniones y aportes de los cuales, para citar un reciente ejemplo, la historia de los Agustinos de la Asunción del historiador René León Gallardo que con su conocida ilustración, honra a la ciudad y ennoblece también al mismo tiempo al Diario El Andino.
Los diarios de provincia –a diferencia de los de circulación nacional- viven y sobreviven con esfuerzo, con dificultades que solamente vence la vocación de servicio público, en un tiempo y en una época en que tantos apuntan al servicio del bien común pero –como se ha demostrado- solamente tienen en consideración sus particulares intereses personales y partidistas.
Los pensamientos y composiciones del folclorista Chito Faró –a quien nuestro inolvidable cronista Luis Rojas elogiara tantas veces- en una de sus composiciones, recopilada por su viuda Elena Abarca señalaba: “Los Andes es un sueño, lo mismo es Aysén”. Los Andes fue un sueño o en un futuro cercano lo será, y en él, no nos cabe duda, tendrá un rol importante El Andino.