I Por Katherine Araya Matus Seremi de Gobierno
Veintisiete años han pasado desde que con un lápiz y un papel derrotamos una de las dictaduras más feroces de Latinoamérica y dimos muestra de nuestro amor por la democracia y por Chile. Han pasado 27 años en los que como país hemos progresado y nos hemos posicionado con una economía abierta al mundo y con una sociedad que ha ido madurando cambios y transformaciones que sin duda han mejorado el país.
En este segundo gobierno de la Presidenta Bachelet, el 5 de octubre nos encuentra en un momento de oportunidades, de mejorar lo ya hecho y de reformar aquello que como sociedad nos duele y nos impide avanzar en la dirección correcta. Me refiero a los sustantivos logros alcanzados durante este mandato que sientan las bases para un futuro mejor, como el cambio al binominal, la reforma tributaria, la reforma educacional, el derecho a Unión Civil y al voto chileno en el extranjero, entre otras reformas en las que trabajamos diariamente con la convicción de que buscamos un cambio profundo que mejore la calidad de vida de los chilenos, para que nuestro país sea mejor.
En este 5 de octubre nuestra colectividad, la Nueva Mayoría, reafirma su compromiso con la Presidenta y con la ciudadanía, pues tenemos la capacidad de realizar los cambios que los chilenos y las chilenas nos demandan, porque cuando actuamos unidos somos capaces de cumplir la tarea que el país nos impone y es así como hemos proyectado nuestro trabajo desde el gabinete regional, con el liderazgo del Intendente Aldoney y siempre abiertos al diálogo y a la propuesta, para que nuestra región vuelva a ocupar su sitial de protagonismo en el desarrollo del país.
Como lo señaló nuestra Presidenta, “tenemos un proyecto fundado en valores y basado en aspiraciones ciudadanas; tenemos la fortaleza y el tesón para hacerlo realidad, sobrellevando muchas veces obstáculos que parecieran insalvables. Si a esa fuerza le sumamos más unidad en nuestra diversidad y más trabajo leal en las duras y en las maduras, vamos a seguir estando a la altura de lo que Chile necesita y espera de nosotros”.
Desde la región, tras 27 años del triunfo del No, reafirmamos nuestro compromiso con la democracia y la construcción de un país más justo. Seguiremos trabajando con la misma convicción, todos por Chile.
