Un total de 33.745 personas cruzaron la frontera entre Chile y Argentina a través del paso Los Libertadores durante Semana Santa, la mayoría turistas argentinos que debieron soportar largas esperas para ir de un lado a otro del macizo andino.
La cifra se considera todo un récord y que era previsible dado el constante incremento de turistas argentinos que venía ingresando al país, la mayoría en viaje de compras aprovechando las ventajas comparativas que le significa adquirir productos en Chile, gran parte de los cuales lo hace tanto en Santiago, Los Andes y San Felipe, preferentemente.
De acuerdo a cifras de la Unidad de Pasos Fronterizos, el año pasado para esta misma fecha la cifra sólo alcanzaba a 9.500 personas, es decir que su número se triplicó durante la Semana Santa, siendo lo más negativo la tensa espera para cruzar la Cordillera de los Andes, entre diez y doce horas, originándose una enorme congestión con filas de vehículos a la espera de cumplir los trámites migratorios.