El martes se cumplieron 34 años desde que el deslizamiento de nieve provocara la muerte de 27 personas.
Con una misa en el Santuario de Santa Teresa de Los Andes el Servicio Nacional de Aduanas, la Policía de Investigaciones y el Servicio Agrícola y Ganadero conmemoraron junto a las familias de las víctimas un nuevo aniversario de la tragedia ocurrida en el Complejo Fronterizo Los Libertadores al anochecer del 3 de julio de 1984, cuando una avalancha sepultó parte de las instalaciones, cobrando la vida de 27 personas.
En la Eucaristía, celebrada por el rector de Santuario Padre Erwin Montoya, se destacó el rol de los servidores públicos que trabajan en frontera, que muchas veces exponen su vida por cumplir con las funciones que les encomienda su rol.
El Director Nacional de Aduanas, Claudio Sepúlveda, explicó que “ese sentimiento de solidaridad, de acompañamiento, de sentirse uno solo, de sentirse familia, me conmueve y es un llamado de atención para las generaciones futuras”.
Y agregó que “ese sentimiento de familia, que se huele y que se siente, es lo que rescato. Lamentablemente estamos conmemorando la muerte de nuestros funcionarios, pero vale la pena que quienes ingresen al Servicio puedan apreciar estas actividades y que sea el signo que los motive para poder trabajar mancomunadamente con las demás instituciones”.
Los hechos de 1984 se desencadenaron luego de que un temporal intenso azotara la zona central durante varios días. Así, la noche del 3 de julio, mientras se mantenía cerrado al paso y los funcionarios cumplían con su turno en la zona de descanso a la espera de la reapertura del complejo, una avalancha de nieve arrasó con parte de las instalaciones.
En esta oportunidad, después de la misa, las máximas autoridades de los servicios entregaron un reconocimiento a las familias de las víctimas.
El Subdirector Operativo de la Policía de Investigaciones, Darío Ortega, comentó que “estamos muy contentos como institución de poder venir a saludar a los deudos de los mártires, que con su ejemplo nos dejaron una lección de vida, de valentía, de heroísmo y una lección de sacrificio. Este año nuevamente quisimos acompañarlos en este lugar que es tan emblemático le da una doble emotividad”.
Para la jefa de la división de Asuntos Internacionales del Servicio Agrícola y Ganadero, Verónica Echeverri, “en esta ceremonia se ve la familia de los servicios, la familia al interior de la institución y la familia de la persona. Creo que lamentablemente por una tragedia valoran estas cosas y eso se ve cuando uno participa en este tipo de ceremonias”.
LA LISTA DE FALLECIDOS ES LA SIGUIENTE:
Por el Servicio Nacional de Aduanas: Mario Acuña Correa, Nicolás Gallardo Sepúlveda, Juan González Olivares, Francisco Olivieri Palacios y José Zucco Carrasco.
Por la Policía de Investigaciones de Chile (PDI): Subcomisario: Eugenio Fernández Ramognini, Inspector Roberto Canales Delgado, Detective Pedro Poblete Almendra, Detective Rodolfo Lobos Marambio, Detective Sigisfredo Valenzuela Núñez, Encargado de Telecomunicaciones Raúl Mora Berrocal, Guardia de Mantención Carlos Antonio Fuentes. Además fallecieron también María del Pilar Navarrete y el menor Sebastián Fernández Pizarro, esposa e hijo del Jefe de Comisión de Servicio, Subcomisario Eugenio Fernández.
Por el Ejército de Chile: Capitán Doris Pizarro Rodríguez.
Por el Servicio Agrícola y Ganadero: Francisco Perales Alvares, Porfirio Valladares Fuentes, Domingo Valdés Galdámez, Antonio Veas Flores y Mario Robles Beiza.
En la oportunidad también fallecieron particulares que cumplían funciones en el recinto:
Hugo Corvalán Gómez; Ricardo Navarrete Barros; Manuel Silva Villalobos; Antonio Buscovic Ruiz; Pedro Sánchez; Sergio Estay Vivar y la menor Alejandra Rozas Corvalán.
Para Ana María Miranda, esposa de Mario Acuña, uno de los funcionarios de Aduanas fallecidos en la tragedia, “es una pena que uno va a llevar siempre, pero con el tiempo se hace menos doloroso, pero no se olvida. Quedé con un hijo de seis meses y me gratifica que esta ceremonia siga en el tiempo. Además, siempre estaré agradecida con la Aduana que no se olvida de sus funcionarios”.