Por: Eugenio Astudillo Leal
En el siglo primero Antes de Cristo, Plutarco, en su Libro Obras morales y de costumbres, atribuye a Medion de Larisa, un personaje que cinco siglos antes había sido consejero de Alejandro Magno, como el autor de la frase que más adelante analizaremos, ya que, entonces, en esa época “ordenaba a sus secuaces que sembraran confiadamente la calumnia, que mordieran con ella, diciéndole a la gente que cuando ya hubiere curado su llaga, siempre quedaría la cicatriz”.
Esta máxima aparece nuevamente con fuerza en el siglo XXVII ya como conocido proverbio, de acuerdo a lo señalado por Roger Bacón en su Obra: De la dignidad y el desarrollo de la ciencia, que expresa “Como suele decirse de la calumnia, calumnien con audacia, siempre algo queda”
En el siglo XXVIII Roussean pone en boca de un Famoso Delator esta frase singular en favor a las calumnias “Por más grosera que sea una mentira señores, no teman, no dejen de calumniar. Aun después que el acusado haya desmentido, ya se ha hecho la llaga, y aun que sanase, siempre quedará la cicatriz”.
Entrado el Siglo XIX, en su obra Les Enfants d’Edouard, Casimir de la Vignare puso en frase la expresión más cercana a la que conocemos ahora “Mientras más increíble es la calumnias, más memorias tienen los tontos para recordarla”
Todo lo anterior viene a demostrar que Goebbels – que fue Ministro de Propaganda Nazi – y que hizo de la mentira su arte y herramienta. No fue él, como se cree, el inventor de la frase como se conoce hoy, sino que, se confunde, que él fue el mayor depositario de su tradición. Un gran mentiroso.
Por último en esta historia de la mentira como protagonista, Sir Winston Churchill en su Artículo “De la Fábrica de la Mentira”, también hace uso de la legendaria frase de la calumnia para afirmar que: “Proferida una mentira, sigue repitiéndola sin que nada y nadie lo pueda impedir, hasta que, por último, tú mismo acabas creyéndola. Por eso que el Inglés tiene también el siguiente principio: “Cuando mientes, miente también en grade y por sobre todo persevera en la mentira. Y aún siguen mintiendo, aun a riesgo de volverse ridículos”
He hecho una pequeña historia y documentado esta simple pero demoledora frase, que es más antigua que Cristo en sus orígenes, y que hasta hoy se usa, para basar todo lo inconsecuentes, informales y traidores que hemos sido, en el último tiempo; previo a esta pandemia, con los integrantes de Carabineros de Chile, a los cuales, en el mes de octubre y noviembre, y bajo esta legendaria frase de más de dos milenios, “miente, miente, que algo queda”, aceptamos que grupos anarquistas, “jóvenes idealistas”, “de primera línea”, “de la nueva generación”, abusaran de ellos, los agredieran a mansalva, los trataran de quemar vivos, y les dijeran cualquier tipo de improperios, para después refugiarse en actitudes inocentes y santificadas de que “no estaban haciendo nada”, “solo pasaba por ahí” “estaba sacando fotos” etc., escondiendo con estas o más mentiras su verdadero espíritu violentistas que entre diferentes grupos anárquicos quemaron varias estaciones del metro, edificios y agredieron y asaltaron a personas.
Lo más triste fue con esa actitud acomodadamente mentirosa, más el concurso de ciertos noticiarios alarmistas de televisión, y como es habitual, con el concurso de algunos políticos de siempre; que no mueven un dedo por menos de 10 millones c/u, lograron implantar a primera vista, entre la opinión pública, de que teníamos Carabineros desactualizados, criminales, con mala formación, etc., colgándose una vez más del viejo pero eficaz dicho “miente, miente, que algo queda” y ahora también, con la funcia de los derechos humanos, dejaron a muchos chilenos dudando del actuar de Carabineros. Pero las cosas se demuestran con hechos, y hoy, después de desestimadas en tribunales varias de esas acusaciones antojadizas, y producida la desgracia del coronavirus, en donde Carabineros ha tenido; como siempre en estos casos, una brillante e impecable labor, humildemente solo me queda decirles, que como chileno, andino y adulto mayor, ordenado, que trabaja y respeta las leyes, y ante la proximidad del 27 de Abril, su día nacional, que tengan todos ustedes un muy feliz día, que sigan adelante en sus doctrinas laborales en protección al pueblo legalmente ordenado, y que a pesar de las mentiras de los malhechores y anarquistas, Carabineros de Chile siguen teniendo el respeto y cariño de la mayoría de los chilenos… FELIZ DÍA CARABINEROS