El hecho se conoció varios días después de ocurrido
La Superintendencia de Educación de la región se encuentra investigando el incidente ocurrido en el interior de la Escuela José Miguel Carrera de Los Andes producto del cual un alumno de séptimo año básico perdió un testículo al recibir un fuerte golpe en sus genitales por parte de un compañero.
El agresor lo golpeó en los genitales con una paleta de ping pong, razón por la cual debió ser intervenido de urgencia en el Hospital San Juan de Dios de Los Andes donde le extirparon el testículo.
NO FUE INFORMADO
El padre del estudiante, Luis Ordenes, denunció que hubo negligencia por parte de la dirección del establecimiento que no lo informó oportunamente de lo sucedido, y días después de ocurrido el incidente se percató de las molestias que presentaba su hijo, debiendo llevarlo al hospital donde resolvieron someterlo a una intervención quirúrgica de urgencia.
El trabajador se queja que la dirección de la escuela ni siquiera trasladó a su hijo al servicio de urgencia una vez ocurrida la agresión, lo que agravó su condición hasta que por su gravedad tuvieron que operarlo, e incluso la familia ha debido asumir todos los gastos médicos y hospitalarios.
“A mí no me avisaron nada del colegio, ni siquiera lo mandaron al hospital y nada. Mientras estaba en el hospital no recibimos ninguna ayuda, ninguna información. Se lavan las manos unos a otros, la profesora dijo que no estaba, pero después se obtuvo la información de que los niños le habían avisado que le habían pegado a mi hijo. Actualmente estoy corriendo yo con todos los gastos”, dijo al padre del estudiante afectado.
INFORMACIÓN TARDÍA
El director regional de la Superintendencia de Educación, Pablo Mecklenburg, dijo que el hecho fue verificado dos días después de ocurrido por los padres del menor y apoderados del establecimiento, expresando que este tipo de situaciones de alto nivel de gravedad no deben seguir ocurriendo en nuestros establecimientos educaciones, instando a los responsables de los colegios a comunicar estos hechos.
“El colegio se enteró dos días después de algún hecho que había ocurrido. Actualmente hay un procedimiento al interior del establecimiento, se está analizando la responsabilidad de lo que pudo ocurrir. Insisto que no le puede pasar a un colegio dos días una situación que termina en una cuestión tan grave. Si alguien no hace lo que tiene que hacer con la información que corresponde después serán las investigaciones que corresponden y las sanciones que corresponden. La regla de oro es ‘comuniquemos, informemos de manera automática”, señaló Mecklenburg.
La directora del establecimiento no se pronunció al respecto señalando que el caso se encuentra en investigación sumaria.