Por: José Manuel Díaz Porzio
El 19 de abril de 1933, culmina el proceso de unidad con la asistencia de 70 delegados, 12 de ellos pertenecían a la Orden Socialista, 14 al Partido Socialista Marxista, 18 a la Nueva Acción Pública y 26 a la Acción Revolucionaria Socialista. Desde su inicio se constituye en un movimiento revolucionario, en base a la unión de los trabajadores manuales e intelectuales.
El año 1935, crea la Federación de Mujeres Socialista (FMS) , orientada a luchar por los derechos económicos, sociales, civiles y políticos de la mujer chilena. Meses después, el 4 de noviembre nace la Federación de la Juventud Socialista de Chile (FJS).
Antes que el parlamento discutiera el tema de la igualdad de género y diversidad, el partido lo lleva a la realidad en su interior, para finalmente proclamarse como partido feminista.
Durante la República Socialista, por decreto, se crea el Banco del Estado y durante el Gobierno Popular, se lleva adelante la Nacionalización del Cobre, cuyos ingresos siguen siendo el «sueldo de Chile» como lo dijo el Presidente Salvador Allende Gossen.
Desde esta tribuna, mis saludos fraternales a sus fundadores, a sus mártires, a la militancia y a todo ese pueblo socialista, que no siendo militante, apoya y comparte nuestros principios.