Aniversario centésimo décimo quinto del Liceo Maximiliano Salas Marchán

Aniversario centésimo décimo quinto del Liceo Maximiliano Salas Marchán

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José Ramón Toro

La importancia de la historia y de su saber.

El 14 de marzo de 1904, en el período presidencial de don Germán Riesco por decreto N° 287 se crea el Liceo de hombres de Los Andes. Es así que (…)”un grupo de andinos envían un telegrama al Ministro de Instrucción”(…) cuyo texto reza así:

(…)” Los Andes, marzo de 1904. Señor Ministro de Instrucción Pública. Santiago, La Moneda. Los padres de familia del Departamento consideran de urgente necesidad la pronta instalación del Liceo, creado por el actual ley de presupuesto en esta ciudad y ruegan a S.S. interponga su valiosa influencia ante el Consejo de Instrucción Pública con este objeto”(…)

En ese año, Don Maximiliano Salas Marchán, profesor de Estado, imparte clases de Castellano en el Liceo de Hombres de San Felipe y, es. (…)”en estas incesantes labores de perfeccionamiento y actividades extracurriculares que forma la academia literaria del Liceo donde es integrante don Pedro Aguirre Cerda”(…), quien fuera presidente de la República y, cuya casa es ahora un Museo en la comuna de Calle Larga

Ahora bien, (…)“La creación del Liceo de hombres de Los Andes (…) vino a satisfacer una notoria aspiración de la sociedad andina de la época. Maximiliano Salas Marchán, cuando por sus méritos fue nombrado su Rector; dotó al Liceo de los elementos de Historia Natural, el equipamiento para le enseñanza de Historia y Geografía”(…). Llegó a confesar lo siguiente: (…) “siempre recuerdo, como uno de los períodos más gratos de mi vida que fui rector del Liceo de Los Andes de 1904 a 1912”(…) Y, es al final de su período como rector que (…)” una joven maestra conoce y trata a Maximiliano Salas Marchán, le respeta y admira(…)” Se trataba de Lucila Godoy Alcayaga (Gabriela Mistral) quien recibió el apoyo y consejos de don Maximiliano Salas, para trabajar como maestra en el Liceo de Niñas de los Andes (donde, hoy, está ubicado en Círculo Italiano en calle Esmeralda) durante cuatro años.

El historiador y ex alumno del Liceo, don Abel Cortez Ahumada, en su obra de “Historia del Liceo” con motivo de su Centenario, plasma el perfil de este gran maestro. (…)”Hombre de marcado carácter erudito, comprometido con la labor educativa y su influencia en el desarrollo social”(…) basa su pensamiento educativo en la pedagogía social”(…)

(…)”En lo concreto, las ideas de don Maximiliano era comenzar influenciar a la comunidad desde la Educación Pública Secundaria a todas las esferas del “medio social”. El Liceo se abre a la comunidad, como un espacio (…) potenciando a los hombres y mujeres (…)

En su pensamiento, le Educación, es la herramienta principal para “regenerar” al pueblo y a las clases trabajadoras.

El Liceo sería el espacio donde convergen las energías de la solidaridad social produciendo desarrollo higiénico y moral. Por ello el Liceo está abierto tanto a las elites como a mujeres y hombres pobres. El Liceo es para todos”(…)

(…)”La inauguración del Liceo de Los Andes fue un acontecimiento de gran importancia para la sociedad local de la época. Debemos pensar que el Liceo provinciano era el gran centro académico de la ciudad, por lo que su instalación en Los Andes, no solamente significaba la posibilidad de formar estudiantes secundarios, sino también, la posibilidad de contar con un centro cultural que contribuyera al desarrollo intelectual y artístico de la ciudad.”(…)

Me permito citar del texto Educación y Progreso (1977) de la Comisión Cultura del CRA del Liceo Max Salas, un fragmento del discurso de Incorporación de don Maximiliano, como miembro académico de la Facultad de Filosofía y Ciencias de la Educación de la Universidad de Chile en 1942:

(…)”La inteligencia y el saber mucho pueden, pero no lo pueden todo. La historia y la experiencia diaria nos abruman con ejemplos de hombres inteligentes e instruidos, cuyos actos deplorables nos sorprenden y nos indignan. Una educación intelectualista es trunca y expuesta a ocasionar daños (…), si otras épocas de la educación se caracterizaron por el ideal de la belleza, ensalzado por los griegos (…) la educación en la época actual debe sobresalir por el espíritu de servicio social (…) la patria espera de la escuela nuevas generaciones en quienes, vencido el individualismo: el ideal de servicio sea la antorcha de la vida”(…)

Y, finalizo agradeciendo a los muchos profesores de Historia pues, gracias a ellos, se mantiene viva La Memoria, se puede conocer e interpretar nuestro pasado y nuestro presente, permitiéndonos proyectar de modo informado un futuro con mayor conocimiento y certeza. Gracias a los profesores de Historia, hay cronistas e historiadores. Gracias a ellos, pude investigar, leer y presentar esta breve columna, parte de la Memoria e Historia de nuestra Ciudad y Liceo.

Que sea feliz.

José Ramón Toro Poblete
Profesor
Liceo Max Salas Marchán

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