Un cuidador de autos de iniciales F.L.O, de 48 años, fue detenido en flagrancia por Carabineros luego de ser descubierto tratando de ingresar a robar a una vivienda de la población Bicentenario, para lo cual utilizaba un napoleón para sacar en ventanal del inmueble, y luego hacer lo propio rompiendo un candado de una bodega de la misma propiedad.
El hecho se produjo alrededor de la 1:45 de la madrugada cuando el hombre ingresó al antejardín de una vivienda ubicada en calle Pedro Aguirre Cerda premunido de la herramienta para arrancar de su base ventanal principal del living. Al fracasar en su intento se desplazó hasta una bodega ubicada en el patio del inmueble logrando abrir el candado e ingresar en busca de especies de valor.
El ruido causado por el sujeto despertó al propietario que de inmediato se comunicó al nivel 133 de Carabineros denunciando lo que estaba ocurriendo.
Funcionarios de la Tercera Comisaría acudieron al lugar encontrando al ladrón oculto en la bodega junto al napoleón que estaba utilizando para cometer el delito, siendo detenido de inmediato.
Se estableció que el hombre registra dos condenas anteriores, una de las cuales es de 10 años y un día y la otra de 5 años y un día por delitos de robo.
FORMALIZADO
Por este nuevo hecho fue puesto a disposición del Juzgado de Garantía donde fue formalizado por el delito de robo en lugar habitado frustrado, y el fiscal Raúl Ochoa solicitó la aplicación de la medida cautelar de prisión preventiva.
Por su parte el defensor Cristóbal Romero se opuso a tal petición del Ministerio Público, señalando que el imputado ingresó al inmueble al encontrar la reja del antejardín sin llave, y que su intención no era cometer un robo, sino que pasar la noche en el lugar por encontrarse en situación de calle.
Por lo anterior, dijo el abogado, no existe constancia que su representado haya escalado la reja del antejardín para ingresar al inmueble.
Luego de escuchar los argumentos de las partes, finalmente la jueza de Garantía Valeria Crosa rechazó la petición de la Fiscalía y por ende no otorgó la prisión preventiva. Señaló la magistrado que al no verificarse acto de fuerza era verosímil la tesis del abogado defensor.
De esta manera la jueza le aplicó al imputado las cautelares de firma mensual en el Ministerio Público, arraigo nacional y prohibición de acercarse a la víctima por los dos meses establecidos para el cierre de la investigación.