Ante falsos avisos de secuestros que circularon por Facebook.
Carabineros de la Tercera Comisaría desmintió en forma categórica la ocurrencia de dos supuestos casos de secuestros que se habrían producido en Los Andes, luego que el lunes a través de redes sociales, particularmente a través de Facebook, comenzaran a circular avisos dando cuenta de tales situaciones y que se viralizaron, donde uno de los mensajes daba cuenta de la sustracción de un niño en un vehículo en el mall Espacio Urbano y el otro relacionado a una situación vivida por una mujer.
Al respecto, el capitán Víctor Torres, subcomisario de los servicios, sobre al primer supuesto caso en donde se habría visto involucrado un menor de edad, afirmó que “Carabineros no mantiene ninguna denuncia, registro y no concurrió a ningún procedimiento relacionado con este tipo de situaciones”.
En cuanto al segundo presunto hecho, indicó que tras recibirse información en tal sentido, donde la supuesta víctima era una mujer de 32 años, se trabajó con hermetismo por parte de las instituciones policiales y se realizaron una serie de indagaciones dispuestas por la Fiscalía “ya que había algunas situaciones que hacían presumir que lo que estaba ocurriendo no era tan así y se logró establecer que no hubo la existencia de un secuestro, sino que más bien hubo un problema de índole sentimental por cuanto la supuesta víctima tomó la mala decisión de responsabilizar a un tercero respecto a un problema matrimonial que esta mantenía”.
Indicó que incluso el cónyuge se hizo presente en la comisaría “para verificar qué estaba ocurriendo con la situación personal de su señora”.
Tras las diligencias, se dispusieron los cursos de acción instruidos por el Ministerio Público.
“NO SON CAPACES DE DIMENSIONAR LAS CONSECUENCIAS QUE PUEDEN GENERAR”
Ante estas situaciones, el capitán Torres hizo un llamado directo a los usuarios de redes sociales “a ser responsables y conscientes en la información que se publica, más aún cuando guardan relación con el ámbito familiar, toda vez que no son capaces de dimensionar las consecuencias que pueden generar y sobre todo cuando se involucra a menores de edad, ya que pese a ser falsas igual provocan una sensación de inseguridad tremenda, especialmente en las mamás y papás”.
Insistió que las redes sociales no están para causar alarma pública, por eso es fundamental que la información que se va a publicar o que se va a compartir “sea corroborada y tenga veracidad, ya que incluso hay una serie de diligencias investigativas en el ámbito policial que se están realizando y que muchas veces fracasan por esta información falsa que anda circulando”.
A ello debe sumarse la activación de Fiscalía como la desviación de personal y medios logísticos policiales para asuntos que no son reales, en desmedro de hechos que efectivamente puedan estar afectando a la población.
