Por: Alberto Inostroza Morales
En entrevista hecha en enero, por una emisora local (Suoerandina), al SEREMI de Educación de la Quinta Región, don Alejandro Tapia, se le consultó sobre el posible CFT para la provincia de Los Andes y respondió usando tres conceptos fundamentales. (1) Se están haciendo los estudios de factibilidad, los que debieran concluir en el presente mes de enero, (2) toda la comunidad debiera apoyar la iniciativa y (3) Dijo que se requiere de una inversión no inferior a los 2.000 millones de pesos. Esperando conocer los detalles del estudio, admitiendo que los recursos llegarán vía presupuesto nacional, que no habrá otras necesidades más urgentes que atender y que no habrá oposición de aquellos que quieren un estado reducido que no afecte a la iniciativa privada, los andinos pueden asumir que, por ahora, el CFT en Los Andes será una realidad, así se desprende de las palabras del diputado por la zona, Marco Antonio Núñez y del propio Alejandro Tapia, máxima autoridad de educación en la Quinta Región, palabras expresadas en la misma emisora ya señalada.
Recogiendo la propuesta del SEREMI, expongo algunas ideas, que se originan en la historia de ese tipo de institución educacional en la ciudad de Los Andes.
Primero, el edificio que cobije al CFT deberá identificarse inmediatamente con la institución y no ser un “ex” local de otra entidad. Deberá tener espacios y dependencias para docencia, biblioteca, talleres, actividades culturales, deportivas, recreativas, administrativas y de estudio o de investigación.
Segundo, las especialidades deben estar estrechamente vinculadas a realidad económica actual y futura de la zona geográfica más directa (provincias de Los Andes, San Felipe y Petorca ) y de aquellos otros lugares que los adelantos en la infraestructura vial y en los medios de transporte se hacen cada vez más cercanos (Santiago, Valparaíso, Viña del Mar, Quillota. Limache, Calera, etc.). Las especialidades deben renovarse oportunamente e incluso deben pensarse como una etapa previa de ingreso a niveles superiores de educación. La propuesta curricular ligada a las especialidades es la llamada a dar dinamismo al CFT
Tercero, los recursos materiales deben ser concordante con los requerimientos delas especialidades y la cantidad de alumnos que necesitan atención. Hay que tener presente que algunos recursos necesitan insumos, mantención, reparación y renovación. Hay que pensar en talleres y laboratorios adecuadamente equipados, en biblioteca actualizada y pertinente, salas computacionales apropiadas. Implementación deportiva cultural y recreativa que permita dar un “plus” a la formación técnica.
Cuarto, un equipo docente debidamente seleccionado e identificado con la formación técnica. Conocedor de la especialidad y de materias pedagógicas. Dispuesto a la capacitación y el perfeccionamiento. Abierto a los cambios y motivador con los alumnos. La conducción del equipo docente será clave para obtener buenos resultados y dependerá del director o rector y su equipo técnico
Quinto, y finalmente, tres actividades de apoyo fundamentales para el funcionamiento y desarrollo del CFT. Labores administrativa que aseguren el orden, eficiencia y eficacia a todas las acciones del Centro.. Gestión técnica-pedagógica que brinde y genere condiciones de calidad a las tareas formativas esenciales del Centro. Por último, actividades de estudio e investigación que otorguen actualidad y proyección al CFT, evitando que se convierta en una institución anquilosada.
Al parecer durante todo el año 2017 habrá tiempo para debatir y proponer lo que esperamos del CFT.