Por: Jorge A. Walters Allende
Resulta indesmentible que, lo que está ocurriendo socialmente en el mundo, tiene mucho en común.- Esto amerita una investigación seria, profunda y sociológicamente científica, sobre las causas que, en cualquier latitud, dan origen a estas conductas, muchas veces violentas e irracionales, de personas, de todas las razas nacionalidades y creencias que, en los más diversos idiomas y países, lo expresan levantando barricadas, saqueando, destruyendo importantes y muy costosas infraestructuras de Servicio Público, exteriorizando así las rabias acumuladas, frente a situaciones de abuso, de enorme temor, de impotencia, de injusticias, de inequidad, de xenofobias y/o de racismos, etc.- Al no existir un ambiente propicio para el diálogo, a menudo los manifestantes, se ven infiltrados por minorías delictuales y reciben junto a ellos, respuestas a veces equivocadas de parte de la Autoridad que, casi nunca, consigue apresar, identificar, o sancionar a los autores verdaderos del vandalismo material, como tampoco, demuestra un interés real en erradicar sus causas.- A partir de aquello, los Gobiernos y las Fuerzas de Orden dependientes del Ministerio de Interior, a modo de solución, optan por adquirir material bélico más moderno, y eficiente, para fortalecer su Poder Represivo que, en la medida que es utilizado, a menudo, fuera de protocolo, y no pocas veces en forma imprudente, solo consigue, aumentar el enorme resentimiento social y eleva el número de víctimas que, no pocas veces, se ven afectadas en sus DD.HH..-
Pareciera que, el Sistema Socio-Económico Neo Liberal, según algunos, debido al exceso de mercantilismo y al poco acento en lo social, al irse instalando mayoritariamente en los países, como fundamento para el supuesto crecimiento económico y para el progreso; al parecer, además de haber cumplido su ciclo de vida útil, hubiera incrementado en exceso, la motivación individual, por TENER y acumular, en forma egoísta y a veces dolosa, DINERO y bienes materiales, para adquirir sin problemas, todo lo moderno que, ofrece el Mercado y así alcanzar el máximo PODER, influencia, respeto y consideración posible, dentro de una sociedad, en que el SER, pareciera tener poco valor .-
No extrañó por eso que, la actividad económica pronto fuera dando origen a polos de desarrollo y desigualdad, entre aquellos más ilustrados que, con ingenio y apoyo de los medios de comunicación, lograban influir en los Poderes Legislativos, para propiciar leyes que, les permitieran obtener numerosos privilegios económicos y ventajas, para alcanzar gran riqueza y aquellos otros que, debido a la poca Educación y debido a sus precarios, e insuficientes ingresos y endeudamiento, se iban quedando cada vez más rezagados y sólo crecían en número, convirtiendo a estos sectores, en caldo de cultivo para el aumento del delito y del tráfico de drogas, amenaza peligrosa y creciente en todos los países del mundo.-
Los Poderes Autoritarios y Absolutos, así como las Dictaduras, Latino-americanas, de larga data, fueron dando paso a las DEMOCRACIAS, en que, el pueblo comenzó a expresar sus aspiraciones y a exigir en alguna medida la recuperación de sus legítimos Derechos.- Lamentablemente, este cambio estuvo sujeto a restricciones, triquiñuelas y amarres que, aunque fue objeto de algunas modificaciones parciales, nunca llegó a ser lo que la ciudadanía esperaba y lo que, es peor, en Chile, como en la mayoría de los países vecinos, en las Instituciones y estamentos de Servicio Público, comenzó a hacerse habitual la falta de ética, las malas prácticas y lamentablemente, se hizo común hasta en la Instituciones Armadas y de Orden, la corrupción, el cohecho, las malversaciones, la colusión, el financiamiento irregular de la política y la conducta permisiva parcial y cómplice de la Justicia.- Por estas razones y otras similares, varios Presidentes de la Republica de países vecinos, fueron enjuiciados, destituidos y condenados.-“Esto es, lo que la ciudadanía chilena, ahora quiere cambiar y para siempre”.- y por eso no concibe que haya chilenos que, quieran que todo lo indebido y delictual, continúe y se mantenga tal cual.-
Con la llegada de la Pandemia del COVID-19, este estado de desigualdad quedó más en evidencia y se fue masificando con la creciente pérdida de empleos y el cierre de Pymes, producto de las cuarentenas, del Toque de queda y del confinamiento generalizado, como por el incontrolable crecimiento del número de contagiados y de la lamentable cantidad de decesos.- Los enormes y plausibles esfuerzos de los Gobiernos, por no perder el control, muchas veces resultaron insuficientes, a veces erróneos, o tardíos, lo que sumado a la carencia generalizada de recursos mínimos para subsistir, de numerosísimos compatriotas, originó en Chile un “Estallido Social” que, transversalmente obligó a todos los Parlamentarios de los distintos signos, a sentarse a dialogar y a consensuar un camino hacia un Plebiscito urgente que, a través de una nueva Constitución, o Carta Magna, redactada esta vez por la ciudadanía, permita diseñar el nuevo “Marco Regulatorio” que, a futuro posibilite efectuar todos los cambios necesarios, además de agregar aquellos otros temas omitidos en la anterior, para dar solución, a todas las materias en que la ciudadanía estaba discriminada, o claramente perjudicada.- Queda claro entonces que, la Nueva Constitución, per sé, en ningún caso tiene por objeto solucionar los problemas, pero sí debe ser el Marco Regulatorio obligado que, haga posible efectuar los cambios.- …Si lo que, realmente deseamos todos, es el Bien de Chile, debiera haber pleno consenso, sincero y sentido, en que, por ningún motivo, debiéramos dejar pasar esta “OPORTUNIDAD HISTÓRICA”, para redactar una NUEVA CONSTITUCIÓN, que por cierto, repetirá la base común, esencial e inevitable de todas las “Cartas Magnas”, del mundo, pero, como muchos afirman, ésta vez, libre de la participación de los actuales Parlamentarios, en los que, la gran mayoría ciudadana ya no confía, porque, ellos, con el correr del tiempo, terminaron legislando en beneficio propio, marginando a casi el 90 % del electorado que es INDEPENDIENTE, a quienes representaban, privándolos de la legítima posibilidad de presentar candidatos a cualquier cargo de elección popular.- De este modo, legalmente se fueron apropiando del derecho exclusivo a nominar candidatos, que, en adelante, sólo han podido ser, aquellos ciudadanos afiliados, o miembros regulares de Partidos Políticos.- En honor a la verdad, es necesario que hoy, nadie tenga dudas sobre cuál es la real disyuntiva que, por cierto es una sola, bien clara y precisa, frente al Proceso Constituyente, hay dos opciones y ambas son muy válidas y respetables: quienes quieren que todo siga tal cual y que, no haya cambios, deben votar: RECHAZO y aquellos otros que, quieran que, todo lo indebido y delictual desaparezca, deben votar APRUEBO.- En consecuencia, por el bien general del país, todos(as) esperamos que, esta GRAN OPORTUNIDAD HISTÓRICA, no sea motivo de división, conflictos, ni descalificaciones.- Por eso… Hagamos los máximos esfuerzos, para elevar el nivel del diálogo, de modo de atenuar nuestras apasionadas expresiones, a veces subidas de tono, e imprudentes comprometiéndonos a tener un trato ético, respetuoso ante la diversidad de nuestras visiones y por sobre todo, en pos de la debida y sentida FRATERNIDAD.- ¡Por el bien de Chile! …Si Ud. Concuerda con lo expresado, Decrete con Fuerza y Convicción: ¡¡¡QUE ASÍ SEA !!!