Sin embargo, fue dejado en libertad luego de la audiencia de formalización.
Funcionarios de Carabineros de la Tercera Comisaría detuvieron a un delincuente con nutrido prontuario policial, de iniciales E.F.V., de 39 años, luego que fuera sorprendido robando al interior de una vivienda de la Población Bellavista de la ciudad Los Andes.
Los antecedentes policiales y de Fiscalía dan cuenta que fue alrededor de las 16:30 horas
cuando el antisocial ingresó a la casa, que estaba sin moradores, luego de romper el vidrio de una ventana y abrirla, comenzando a registrar las dependencias desde donde comenzó a sustraer diversas especies que fue guardando en un bolso.
Fueron vecinos que al sentir ruidos y advertir la presencia del individuo llamaron dando el aviso a Carabineros, acudiendo rápidamente al domicilio señalado una patrulla y cuyos funcionarios encontraron en plena comisión del delito al ladrón, que ante la presencia policial dejó las pertenencias que estaba robado y escapó por el patio, siendo seguido, alcanzado y arrestado por los uniformados.
Horas después la dueña de casa llegó hasta su vivienda y verificó lo sucedido, informando a Carabineros que durante la madrugada el mismo antisocial había entrado a su domicilio y en cuya ocasión le robó $100.000, un teléfono celular, una cámara fotográfica y un tubo de gas.
El imputado fue llevado hasta el Juzgado de Garantía donde en la respectiva audiencia el fiscal Alberto Gertosio lo formalizó por el delito de robo en lugar habitado frustrado y solicitó la prisión preventiva, a lo cual se opuso el defensor Cristóbal Romero señalando que la reja del cierre perimetral de la casa estaba abierta, que no existía claridad que fue su representado el que quebró el vidrio y que, además, no había alcanzado a sustraer especies, por lo que se estaba frente a un delito de violación de morada.
Al resolver, el juez Raúl Valenzuela estimó que no configuraba el robo porque no fueron sacadas especies del domicilio, cuestionó que la afectada haya señalado al detenido como quien robó las cosas durante la madrugada y que esto obedecía a una “estigmatización” de los vecinos, por lo que no aplicó medidas cautelares y lo dejó en libertad. El plazo de la investigación fue fijado en dos meses.