Declaración del concejal O.Arellano y reacción del diputado Verdessi.
«El derrame de concentrado de cobre ocurrido el miércoles 23 de enero, deja en evidencia, una vez mas, que para Codelco Andina, el río Aconcagua se ha convertido en una cloaca industrial, donde van a caer todos los residuos industriales que se producen a causa de la falta de supervisión y falta de mantención de los procesos de producción», dijo el concejal Octavio Arellano. Y luego arremetió: «Si se están rompiendo las cañerías que transportan el mineral significa que no hay inversión en aseguramiento de los procesos de producción. Ello evidencia que en los hechos, hablar de sustentabilidad de las operaciones es un mero slogan, ya que los hechos muestran lo contrario. Incluso en su declaración pública faltan a la verdad ya que el concentrado llegó hasta el cauce del río Aconcagua, percibiéndose durante todo el día, fuertes olores que afectaron a los vecinos de Río Blanco.
Atendido que en los últimos dos años son reiterados los hechos de contaminación del río Aconcagua por fallas en los procesos industriales, hemos acordado con el diputado Daniel Verdessi, hacer una denuncia formal ante la Superintendencia del Medio Ambiente para que evalúe los daños producidos, identifiquen las reales causas del derrame, los daños en el ecosistema de montaña y los impactos que ello ha producido en la salud de las personas, las medidas de reparación y mitigación que deberá adoptar la empresa minera, además de la implementación de nuevos protocolos por parte de la empresa para prevenir la ocurrencia de nuevos hechos de esta naturaleza.
Desde ahora el nuevo énfasis del control ciudadano que ejerceremos desde el Concejo Municipal de Los Andes deberá ser «Cero Contaminación y Plena Rehabilitación del Ecosistema del río Aconcagua y sus afluentes», tanto por parte de la empresa como por otros agentes contaminantes, como es el caso del transporte.
Expresamos nuestra solidaridad a las familias de Río Blanco y poblaciones cercanas por este nuevo episodio de contaminación que pone en riesgo su salud y afecta su patrimonio natural y las potencialidades turísticas de la cuenca del Alto Aconcagua.»