Más de doscientos catequistas bautismales, pre matrimoniales, de iniciación a la eucaristía y confirmación se reunieron en el Santuario de Santa Filomena para celebrar su vocación y misión de Catequistas en el contexto del Año Santo de la Misericordia.
El encuentro encabezado por Mons. Cristián Contreras Molina y preparado por el equipo de coordinación de catequesis de la Diócesis de Aconcagua, este encuentro reunió a los agentes pastorales encargados de la enseñanza de nuestra fe, en el cual se conmemoró el Día del Catequista con la presencia de comunidades de los decanatos de San Felipe y Los Andes.
Alrededor de las 9.30 horas, los catequistas comenzaron a llegar hasta el Santuario de Santa Filomena, ubicada en la comuna de Santa María, esta jornada comenzó con un momento de oración y posteriormente con las palabras de Mons. Cristián Contreras Molina, OdeM, Obispo de la Diócesis, quien agradeció a cada uno de los presentes por el servicio pastoral que prestan en cada una de las parroquias y los instó a vivir este Año Santo de la Misericordia con un renovado entusiasmo. Además los animó a continuar con este hermoso y valioso servicio que entregan a la evangelización.
Posteriormente hubo adoración al Santísimo, presidida por el Padre Eugenio Duque, fue un intenso momento de encuentro con el Señor para dejarlo entrar en la vida de cada uno de los presentes. Los catequistas pudieron reflexionar desde el encuentro con la Palabra la presencia de Dios en sus vidas que les llama a vivenciar la fe, a rogar por ellos por sus familias, amigos y vecinos. A implorar el aumento de la fe para superar las limitaciones que impiden el acercamiento a Dios y la comunión con los hermanos.
Por la tarde en Padre Cristóbal Mirada, invito a los catequistas a reflexionar en torno al Año Santo de la Misericordia, porque siempre tenemos necesidad de contemplar el misterio de la Misericordia, que es la característica de Dios, la forma como viene a nuestro encuentro, es la que abre el corazón a la esperanza de ser amados para siempre a pesar de nuestro pecado.
Momento importante fue la vivencia del sacramento del perdón de los catequistas. Por ello se agradece la presencia y servicio de Confesiones de los párrocos y vicarios que participaron en este día, acompañando a sus catequistas.