Al finalizar evento en la Medialuna Municipal en Pocuro, huyendo los delincuentes con especies de valor y $10 millones.
CALLE LARGA.– La concesionaria del casino y el grupo musical Piraña 4 fueron víctimas de un violento y millonario asalto al finalizar un evento que se realizó en la Medialuna Municipal de la comuna, ubicada en la localidad de Pocuro, en donde irrumpieron tres delincuentes que les apuntaron, agredieron y robaron implementación musical y la suma de $10.000.000 en efectivo.
Fue la propia afectada quien decidió conceder la entrevista a El Andino y entregar un relato del dramático hecho que tanto ella como los integrantes del reconocido conjunto musical debieron enfrentar, indicando que si bien han pasado algunos meses de ocurrido, a la fecha no tiene información de resultados sobre las diligencias policiales que permitan dar con los autores del delito y su detención.
LE APUNTARON CON PISTOLA, LA ARRASTRARON DEL PELO Y GOLPEARON
Es así que la microempresaria del rubro gastronómico y concesionaria de casinos de rodeos de la zona -que solicitó mantener en reserva su identidad- dio a conocer que el asalto sufrido ocurrió al término de la inauguración de la medialuna efectuada el fin de semana del sábado 18 y domingo 19 de agosto pasado, ocasión en que en ambas jornadas hubo rodeo, almuerzos típicos, presentaciones folclóricas, la ceremonia inaugural y bailables en las noches, con la participación de autoridades y una masiva asistencia de público.
Indicó que a las 23:45 horas del domingo se puso término al evento, estando ella en el casino junto a una persona que le ayudaba y los integrantes de Piraña 4, los que empezaron a guardar en una camioneta sus instrumentos y equipos luego de haber recibido el pago correspondiente.
Alrededor de la medianoche salió por la cocina hacia los baños y luego regresó, acudiendo al lugar donde estaban los músicos a los que agradeció, se despidió y después se fue a acostar tras las extenuantes jornadas, dirigiéndose a una dependencia donde se quedaba por cuanto mantenía bebidas alcohólicas y diversos insumos que al día siguiente debía entregar, asimismo del dinero recaudado durante el evento que guardaba en una caja fuerte de su propiedad.
Solo instantes después comenzó lo que sería una pesadilla real, al entrar repentinamente los asaltantes y vivir minutos de suma tensión.
Así lo revive la víctima: “Me acosté y creo que deben haber pasado unos cinco minutos cuando de repente siento un peso en los pies y al abrir los ojos vi a una persona encima del colchón que preguntó por mi nombre. Estaba vestido como funcionario del OS-7 de Carabineros, el que me pregunta por la plata. Le digo ¿qué plata?, cuando se tira encima mío, me pone una pistola en la cabeza, me agarra del pelo, forcejeo con él y empiezo a gritar a los muchachos que se había metido una persona y me estaba asaltando. Yo gritaba, pero había un silencio único, muy profundo”.
En su narración añade que continuó el forcejeo con el antisocial, “cuando en un momento me da vuelta y tira al suelo, para a continuación arrastrarme del pelo por más de cien metros, golpeándome con la pistola y preguntándome por la plata. Yo lo único que hacía era gritar a los chiquillos”.
TODOS REDUCIDOS EN EL SUELO
De esta violenta forma fue llevada a la dependencia en la que se encontraban los cuatro integrantes del conjunto musical y la persona que le había colaborado, “a quienes veo reducidos en el suelo, boca abajo y con pistolas puestas en la cabeza por dos sujetos encapuchados. De repente el delincuente que me tenía me dio dos patadas en las costillas (que se las fracturó), me di vueltas, me vuelve a tomar del pelo y me pregunta otra vez por la plata, por lo que le tuve que decir donde estaba y se dirigió a la dependencia donde estaba la caja fuerte”.
Añadió que uno de los asaltantes hizo parar a los integrantes del grupo y a la persona que le acompaña, a los que exigió que orinaran en donde quedaron rastros de sangre.
LO ROBADO
Acotó que también le pegaron a uno de los músicos y les robaron el computador y otras cosas del grupo, en tanto que a ella le arrebataron una cadena de plata con una medalla, la billetera con todos sus documentos y el teléfono celular.
Luego, se llevaron la caja fuerte con la millonaria suma de dinero que mantenía, con lo cual debía realizar al día siguiente el pago de las bebidas alcohólicas, el piso del local, al personal de cocina, garzones, verduras, carnes y diversos insumos.
Señaló que una vez que se fueron los violentos asaltantes se llamó a Carabineros denunciando el hecho, constituyéndose personal de la Tenencia Calle Larga, y tras imponerse de lo sucedido el alcalde Nelson Venegas tomó contacto con la Policía de Investigaciones (PDI), quienes por instrucción del fiscal quedaron a cargo de las diligencias investigativas, haciéndose presentes posteriormente detectives de Los Andes y del Laboratorio de Criminalística (Lacrim).
“FUE ALGO MUY GRAVE, FUERON MINUTOS DE TERROR”
“Quiero que se sepa lo que nos pasó, porque fue algo muy grave, fueron minutos de terror que vivimos. En un segundo se me pasó por la menta toda la vida y los años de sacrificio en esta actividad. Pienso que si no hubieran encontrado la plata nos hubiesen torturado toda la noche, a mi golpeado e incluso matado”, expresó la concesionaria víctima.
“LLEVAMOS CUATRO MESES Y NO HAY RESULTADOS”
La afectada lamentó que pese al tiempo transcurrido, aún no haya nadie arrestado.
“El tipo que estaba conmigo tenía la cara descubierta y yo lo tengo identificado en la PDI, fue el que me golpeó, arrastró, entonces no sé por qué, para mí, la PDI no ha hecho nada. Llevamos cuatro meses y no hay nad de resultados, no tengo llamados, solo que están investigando. No puedo creer que no tengan resultados, teniendo a una persona identificada, eso es lo que más me tiene molesta. Cada vez que he ido a saber cómo va el procedimiento, no he obtenido ninguna información”.
Acotó que en el recinto una persona que estuvo en el bailable dejó su automóvil, “al que uno de los asaltantes quebró un vidrio y dejó sangre, tomándose muestras por parte de los detectives que fueron”.
“ESTUVIMOS A PUNTOS DE PERDER LA VIDA”
Manifestó que como microempresaria ha venido trabajando “honradamente y con mucho esfuerzo, tengo hijos que he educado y algunos ya son profesionales para el país, y resulta que en veinte minutos estos sinvergüenzas me dejaron a brazos cruzados, me arrebataron todo, todavía estoy con deudas y hasta el día de hoy estoy pagando de a poco”.
El asalto -dijo- también le dejó efectos traumáticos. “Hasta el día de hoy no estoy bien, quedé mal y te preguntas por qué la justicia y el sistema es así, porque estuvimos a punto de perder la vida, yo y las cinco personas que estaban conmigo”.
OTROS ASALTOS
Señaló que se ha atrevido a hacer público este caso también para poner en alerta a quienes se dedican a la actividad en la zona, considerando las fiestas de fin de año y las que se vienen durante el verano.
Hizo presente que después del asalto sufrido ha habido otros delitos similares en casinos de rodeos en otras comunas del Valle de Aconcagua, teniendo conocimiento de los registrados en Putaendo, El Higueral en San Esteban y en Santa María.
