La mañana de ayer se efectuó juicio abreviado en el Juzgado de Garantía de Los Andes
A las penas mixta de internación en régimen semicerrado por un año y libertad asistida especial por 3 años y un día, y a la de amonestación verbal, fue condenado el joven de iniciales P.O.C., de 17 años, en calidad de autor de los delitos de parricidio y lesiones menos grave en grado de consumados cometidos en contra de su padre Daniel Alejandro Oneto Núñez, de 41 años, trabajador de Codelco División Andina y socios del SUT, y del hombre J.V.R., de 31 años, respectivamente, por los hechos ocurridos la noche del lunes 28 de noviembre de 2016 en una vivienda del Condominio Los Maitenes, de Calle Larga N° 1874, en dicha comuna.
Así lo resolvió la magistrado Valeria Crosa Chiappe en el juicio abreviado que se llevó a efecto la mañana de ayer en la Sala 1 del Juzgado de Garantía de Los Andes, luego de conocer los antecedentes expuestos por el fiscal Alberto Gertosio y el defensor privado, abogado José Villagrán.
Dicha audiencia se llevó a efecto luego que la Fiscalía Local recibiera la autorización del Ministerio Público regional.
Al exponer los antecedentes de la causa y declaraciones de la carpeta investigativa en la acusación verbal presentada, el persecutor detalló que esa noche, alrededor de las 21:00 horas, la víctima mortal Daniel Alejandro Oneto Núñez en compañía de J.V.R. concurrieron hasta una de las casas del Condominio Los Maitenes, habitada por la cónyuge del primero, C.C.B., y sus dos hijos.
En esas circunstancias, el esposo enfrentó a su señora para que reconocieran una relación sentimental que mantenía con el sujeto con quien había llegado, empujándola y sacándola al antejardín de la vivienda en donde se encontraba el otro hombre.
Agregó que en ese instante “el hijo de la víctima, el imputado de entonces 16 años, tomó un cuchillo cocinero desde la cocina, salió hacia el antejardín y en donde su padre estaba agrediendo con golpes de pies y puños a J.V.R., interponiéndose entre ambos y de manera artera y con clara intención de causar la muerte a su padre, le propinó seis estocadas con el cuchillo que tenía en sus manos en la zona torácica”.
Seguidamente el joven se dirigió hacia el otro sujeto a quien le propinó dos estocadas en la espalda.
Producto de la agresión, el padre del joven solo alcanzó a dar unos pocos pasos hasta caer desplomado al piso a la altura de la puerta de ingreso al inmueble, falleciendo en el lugar “debido a la gravedad de las heridas cortopunzantes de tórax, lesiones de carácter homicida, según el informe emitido por el Servicio Médico Legal de San Felipe”.
En tanto, J.V.R. resultó con lesiones por arma blanca en la zona escapular derecha y múltiples heridas cortantes en su antebrazo derecho y zona cervical de carácter menos grave.
Para solicitar dichas condenas el fiscal reconoció tres atenuantes a favor del acusado, siendo éstas la irreprochable conducta anterior, la colaboración sustancial en el esclarecimiento de los hechos y haber obrado por estímulos tan poderosos que produjeron arrebato y obcecación.
Al entregar el veredicto, la magistrado indicó que por encontrarse el sentenciado privado de libertad con la medida cautelar de arresto domiciliario total desde el 1 de diciembre de 2016 hasta la fecha, la pena mixta de internación en régimen semicerrado se le dio por cumplida para todos los efectos legales.
Por su parte, la libertad asistida especial deberá cumplirla debiendo someterse a un tratamiento y con una serie de requisitos, entrevistas y otras exigencias que le indicará un delegado que quedará a cargo.