De las tres alternativas, el estudio se inclina por el escenario histórico-identitario, que abarca las provincias de Los Andes, Petorca y San Felipe, agrupando 15 comunas. La capital de la nueva región sería la comuna de San Felipe.
Bajo tres escenarios sería posible la creación de la nueva Región de Aconcagua, según los resultados del estudio de factibilidad de la Subsecretaría de Desarrollo Regional (Subdere), dados a conocer al mediodía del viernes en la Municipalidad de San Esteban.
De las tres alternativas, el estudio se inclina por el escenario histórico-identitario, que abarca las provincias de Los Andes, Petorca y San Felipe, agrupando 15 comunas. La capital de la nueva región sería la comuna de San Felipe.
El otro escenario es el rural, que contempla a las provincias de Los Andes, Petorca y San Felipe, sumando además la de Quillota. Con esto, la región de Aconcagua quedaría compuesta por un poco más 553.190 habitantes, con Quillota como capital.
La tercera opción es el escenario metropolitano, que incorpora a las provincias de Los Andes, Petorca, San Felipe y Quillota, sumando a la de Marga Marga. La población ascendería a más de 927.500 personas, también con Quillota como capital, superando el número de habitantes con el que se quedaría la región de Valparaíso.
Al respecto, el senador Ricardo Lagos Weber advirtió que se deben considerar factores como el desarrollo de la nueva región y los efectos que tendría la división sobre la actual división, inclinándose por la opción que solo contempla las provincias de Los Andes, Petorca y San Felipe por ser más acotada.
El senador Francisco Chahuán, por su parte, aseguró que con la creación de la región de Aconcagua se acabará con la postergación de las provincias de Petorca, Los Andes y San Felipe, llamando a las autoridades a avanzar para que finalmente se estudie la viabilidad de la presentación de un proyecto de ley.
Los resultados del estudio de factibilidad dan cuenta de que no es utópica la creación de la región de Aconcagua, informe ampliamente esperado y cuyo término estaba comprometido por la Subsecretaría de Desarrollo Regional para antes que finalizara el segundo mandato de la ahora ex presidenta Michelle Bachelet.