Vacunas, evitar lugares hacinados y contacto con enfermos son alguno de los factores claves para prevenir el contagio de niños en tiempos donde abundan las infecciones respiratorias.
Durante las estaciones más frías del año, las infecciones respiratorias son una de las principales causas de enfermedades en niños, por lo cual es muy importante educar y promover medidas de prevención para disminuir el número de afectados.
Las bajas temperaturas y la contaminación son también condiciones que aumentan la posibilidad de contraer infecciones respiratorias, principalmente en lactantes, bebés prematuros, pacientes con enfermedades crónicas y cardiópatas.
Cómo prevenir el contagio y evitar el desarrollo de estas dolencias en los más pequeños, son algunas de las preguntas que aclara el Dr. Raúl Vargas, neonatólogo y pediatra de Clínica Tabancura.
“La primera precaución que se debe tener, es identificar que hay enfermedades que se pueden evitar. Tal es el caso de la vacuna gratuita de la influenza que entrega el Estado, orientada a menores de cinco años, pacientes con enfermedades crónicas y embarazadas. Incluso, es posible comprar una dosis de manera particular si uno no corresponde a la población de riesgo”, indica el pediatra.
Solamente en los casos de los prematuros, menores de mil quinientos gramos o con displasia broncopulmonar y pacientes con cardiopatía congénita, tendrían indicación de colocarse un anticuerpo monoclonal (Sinagys) para prevenir la infección del virus respiratorio sincicial, que es el que más ataca a niños menores y que puede traer consecuencias en cuanto a morbilidad importante o mortalidad.
Los lugares donde se congrega un número importante de personas, también es un elemento importante a considerar. “Se deben evitar lugares públicos como malls o supermercados, por la cantidad de personas y el aire acondicionado que hace circular los gérmenes con facilidad” explica el Dr. Vargas.
En el caso de salas cunas, jardines y colegios, es importante identificar prematuramente síntomas de enfermedad, como congestión nasal, fiebre y tos, por ejemplo. “Muchos padres envían a sus hijos ya enfermos, propiciando un mayor contagio en el establecimiento”, enfatiza el profesional.
¿Cuándo recurrir a un centro de salud?
El Dr. Raúl Vargas advierte sobre claros síntomas para llevar a los menores a una clínica u hospital:
– Si es recién nacido y tiene fiebre o tos, debe ser evaluado.
– Lactantes con hipertermia y temperaturas sobre 39 ½, principalmente si tiene menos de dos meses.
– Niños con fiebre de más de 48 horas
– Cuando presenta algún signo de dificultad respiratoria como:
· Polipnea, es decir, cuando está respirando con mayor frecuencia de lo normal
· Quejido respiratorio
· Retracción de la musculatura intercostal
· Aleteo de la nariz al respirar
· Crisis de ahogo al toser
Para finalizar, el especialista de Clínica Tabancura recomienda a los padres dar énfasis en “evitar todo tipo de contaminación intra domiciliaria, tales como el humo de cigarro y la combustión tipo parafina, además de evitar la exposición de los niños a los altos índices de contaminación, en ese caso, prohibido que hagan ejercicios”.