Por Dr. Denis Panozo V.
Es un tema recurrente en nuestras vidas, principalmente cuando entramos a la adolescencia y las hormonas comienzan a convertirnos en adultos. Es en esta etapa que surgen muchas preguntas y si no encuentras eco o respuestas en tu entorno familiar te lleva a sentir angustia.
Hay una forma de angustia que podemos llamar básica, porque es parte de la condición humana. Sucede cuando en la noche cuando quedamos solo con nuestra blanda almohada y apagamos la luz, uno se hace la pregunta crucial ¿quién soy? Por supuesto ante la dificultad de encontrar una respuesta definitiva uno revive la angustia primordial, la del nacimiento cuando ha sido separado de la madre, y se da cuenta que esta solo. La mejor forma de calmar la angustia existencial es tener claro un proyecto de vida. La angustia del sentido de la vida sobreviene cuando uno siente que su vida no tiene ningún significado, cuando no podemos encontrar con claridad las metas, de tal forma de ser un aporte al mundo, y paradójicamente es en este vacio angustiante donde uno puede inspirarse para hacer un acto creador. En algún momento hay que hacerse cargo de esto y tratar de encaminar nuestra vida a futuro, no dejarnos llevar por la flojera y conformarnos en pasar los días sin hacernos problemas, solo preocuparse en alimentarse y reproducirse, a semejanza de la vida de un animal. De esta manera vamos a llegar a los 50 años y al mirarnos vamos exclamar “que viejo estoy, como se me paso la vida”. Y lo que es más terrible y más angustiante es que pasaron los años sin lograr nada
Cuando uno está muy sujeto a cosas externas, evita encontrarse con esa soledad, se distrae, pero la trampa es que también se aleja de la posibilidad de crear algo propio, el truco es alejarse de ese mundo ficticio, no aislándose sino abandonando la atadura y la falsa imagen que doy al mundo. Si uno se saca los roles dados por la sociedad en la que vive (madre, maestra, pareja, trabajo etc.) No puedes seguir por la vida ocultando tu angustia con cosas vanales para evitar sentirte culpable. Seamos verdadero, evitemos de realizar esfuerzos para dar una imagen que no corresponde. Este tiempo que pierdes en engañar a tus pares, ocúpalo en crecer como persona, enriquece tu espíritu, verás que vas a obtener los méritos para trascender en la vida. De tal forma que cuando toca el momento de abandonar esta, nos iremos en paz y con la alegría del deber cumplido.
