Por: Dr. Denis Panozo Villarroel
Si Usted pierde con facilidad las llaves del auto, los anteojos o el celular, probablemente hace rato asumió que es una persona distraída. Lo que tal vez no sepa es cuando estos pequeños incidentes se repiten en forma periódica e interfieren en el desarrollo de las actividades cotidianas podría tratarse de un problema de Déficit Atencional. Aunque se trata de una condición que por lo común se asocia a los niños, lo cierto es que también afecta a los adultos. Y más de lo que se cree.
Se pensaba que era un problema de maduración cerebral, que cuando el niño maduraba y crecía, se mejoraba. Hay estudios científicos que demuestran que estos niños en su adultez continúan teniendo dificultades. Un 80% de los adultos en Chile que padecen este déficit atencional no sabe que lo tiene, la razón es que persiste la idea que es problema de niños.
El Déficit Atencional es tan frecuente en hombres como en mujeres, se trata de un trastorno que se inicia en la infancia y se diagnostica mucho más en los varones y más tempranamente por su forma de expresión que es más disruptivo, en cambio en las mujeres pasa inadvertida. Este trastorno es un síndrome, es decir un conjunto de síntomas y signos de los cuales lo más notorios son:
1. Dificultad para focalizar la atención en tareas que requieren un esfuerzo de concentración.
2. La distractibilidad fácil frente a estímulos externos (lo que ocurre alrededor) o internos (pensamientos) y la sensación de dispersión es decir tienen muchas cosas en su mente al mismo tiempo sin poder focalizar o profundizar en ninguna.
3. Les cuesta priorizar qué es lo más importante, lo urgente, y que es lo secundario que se puede dejar para después.
4. Son impacientes (impulsivos e hiperactivo) para ellos todo tiene que ser ahora ya. Si una cosa se demora mucho se inquietan, se paran, se dan vueltas…. Los resultados tienen que ser inmediatos.
5. Impulsividad verbal, es decir les cuesta mucho escuchar al otro y dejar que termine de hablar.
6. Son irritables en una forma explosiva, se enojan mucho por algo, aunque luego se les pasa rápidamente.
El Déficit Atencional posee un marcado componente biológico y es un trastorno fuertemente hereditario. Además de haberse identificado los genes involucrados, la respuesta a fármacos es muy importante, mientras que la respuesta a sicoterapia es más débil. Por lo general se aborda con ambas herramientas y aunque el diagnóstico se haga en forma tardía, las perspectivas para los adultos son bastantes alentadoras, hay un 85 % de probabilidad de éxito en la terapia, que se manifiesta en un cambio real en la vida del paciente, se transforman en personas más eficientes, más controladas y al ojo de los demás mucho más maduras.