Con fractura de cadera y codo izquierdo de carácter grave que lo mantienen hospitalizado, resultó un antisocial que cayó desde una altura de cuatro metros al recibir una fuerte descarga eléctrica cuando procedía a robar un foco halógeno desde el frontis de la iglesia Metodista Pentecostal de Chile ubicada en República Argentina N° 291 esquina avenida Perú de Centenario.
El hecho se produjo alrededor de las 4 de la madrugada de ayer miércoles cuando M.A.L.J., de 48 años, llegó al citado templo con la finalidad de sustraer el foco que ilumina la vereda del sector.
Para llegar hasta donde se encontraba instalada la luminaria procedió a escalar por las protecciones metálicas de las ventanas del recinto religioso alcanzando una altura de 4 metros aproximadamente.
Cuando tiraba los cables para arrancar halógeno sufrió una fuerte descarga eléctrica que lo arrojó violentamente al suelo resultando con una fractura de cadera y codo izquierdo quedando tirado por varios minutos en la vereda con fuertes dolores.
A los pocos minutos pasó por el sector una patrulla de Carabineros que se percataron de la presencia del sujeto tirado en el piso pidiendo auxilio, y a su lado estaba el foco que había desprendido del frontis de la iglesia.
El sujeto fue trasladado al Hospital San Juan de Dios y debido a las graves lesiones quedó internado en calidad de detenido.
SEGUNDO ROBO
Un ayudante de la iglesia Metodista informó que la semana pasada sufrieron otro robo de focos también ubicados en la parte exterior del templo, y en aquella ocasión el autor del robo se dio el trabajo de dejar los cables protegidos con huincha aisladora, y existe la presunción que se trata del mismo sujeto que en esta ocasión cometió un error que le significó recibir una descarga eléctrica.
FORMALIZACION EN RECINTO HOSPITALARIO
Durante la mañana de ayer el imputado fue formalizado en el mismo recinto asistencial hasta donde llegaron la jueza Pamela Peralta y el fiscal Osvaldo Basso, quien lo formalizó por el delito de robo en lugar no habitado en grado de consumado.
El fiscal solicitó al tribunal la aplicación de la medida cautelar de prisión preventiva por el abultado prontuario judicial que posee el imputado, donde se consigna que la última detención se registró en octubre del año pasado cuando ingresó a robar a plena luz del día a una vivienda sin moradores ubicada en calle Rancagua.
A LA CÁRCEL
Finalmente la magistrado acogió el requerimiento de la fiscalía decretando la prisión preventiva del sujeto, otorgando un plazo de dos meses para el cierre de la investigación.
Una vez que el imputado reciba el alta médica será trasladado hasta el Centro de Cumplimiento Penitenciario para que comience a cumplir la medida cautelar impuesta por el tribunal.
