La tarde del pasado 6 de noviembre a eso de las 18:30 horas cuando hay mayor afluencia de niños y mascotas en la plaza Macizo Andino ubicada en Villa Doña Natalia en Rinconada de Los Andes, un desconocido atacó a mascota que se encontraba en el lugar. El canino de raza Labrador Retriever se llamaba Maxwell más conocido por todos como Max, la mascota recibió presuntamente un disparo en el costado derecho del estómago.
A pesar de ser trasladado rápidamente a la Clínica Veterinaria Cumbres y ser atendido por la doctora Marcia Ramírez el can no logró sobrevivir dejando de existir a las 23:20 horas de ese mismo día producto de una hemorragia interna que no logró superar, lo que desembocó en tres paros respiratorios desarrollados debido a que su herida era muy grave y claramente efectuada por un humano con total intención de asesinarlo.
En el certificado de defunción emanado por la veterinaria antes mencionada se afirma que «el médico que suscribe certifica que la mascota antes individualizada ingresó a Clínica Veterinaria Cumbres el día viernes 6 de noviembre del 2015 a las 18:45 horas, con claros signos de shock hipovolémico a causa de una hemorragia abdominal interna activa, causada por un proyectil o elemento corto punzante que penetró abdomen lateral derecho causando una hemorragia de órganos internos que determinó la falla multisistémica masiva».
Resulta tremendamente preocupante que se registre un acontecimiento de estas características en Villa Doña Natalia, considerada una de las más tranquilas de la comuna de Rinconada, ya que donde fue asesinado Max es justamente lugar de reunión diaria de niños y mascotas del sector.
Actualmente el hecho se encuentra denunciado en la PDI quienes además poseen una unidad que tiene que ver con la defensa de los derechos de los animales, se espera encontrar al responsable por ser un peligro constante dado a su absoluta falta de respeto a la vida y su presunta posesión de armas de fuego.
Es lamentable este hecho puesto que los animales también sienten y sufren, ellos no pueden hablar y merecen ser respetados, sus vidas valen tanto como las nuestras y también tienen una familia que llora su ausencia y extraña su compañía, hoy un asesino está libre e impune, se recomienda a los vecinos del sector cuidar ahora más que nunca a sus mascotas y niños, hoy fue Max, mañana no sabemos.