«Estimados director, doctores, enfermeras (os), personal y funcionarios del Hospital San Juan de Dios, de Los Andes, especialmente Urgencia y UTI., les escribo para expresarles mi gratitud y felicitaciones por los dedicados y finos servicios recibidos por parte de todos ustedes.
El día sábado 10 de junio aproximadamente a las 14,00 Hrs. mi esposa Claudia llamó a Urgencia solicitando una ambulancia porque yo estaba perdiendo la conciencia, a los cinco minutos llegó la asistencia y desperté al otro día en la cama número tres de la UTI, del Hospital de Los Andes. Qué pasó durante todo ese tiempo?. Un equipo de cuatro médicos, León, Vega, Cerda y Guajardo, además de un equipo interdisciplinario de UTI, resistieron mis embates de energía descontrolada y después de varias horas de descontrol se logró la normalidad. Esa Noche fui derivado a la UCI del Hospital San Camilo de San Felipe, con ventilación mecánica y todas las atenciones al más alto nivel.
Después de 7 días internado, suministrándome medicamentos, oxígeno, atenciones higiénicas, alimentación, controles permanentes las 24 horas del día, escáner, y resonancia magnética, con los exámenes en mano, los médicos informan que había tenido un inesperado ACV, Accidente Cerebro Vascular, sin mayores consecuencias. Gracias a Dios. Una nueva oportunidad de la vida.
Debo reconocer públicamente la excelente atención recibida, tratándose de un episodio de vida o muerte, en donde, esos cinco minutos fueron vitales para el éxito de la operación. El Servicio público de Salud de Aconcagua, está al mejor nivel de atención, con grandes profesionales y equipamiento, al alcance de cualquier hijo de vecino. Les reitero mis agradecimientos y gratitud por los servicios recibidos».
Patricio Barros Viguera, presidente Turismo Aconcagua A.G