Por: Yasna Muñoz Carvajal., académica Escuela Nutrición y Dietética U. Andrés Bello
Las personas que tienen la enfermedad celiaca -desorden autoinmune intestinal crónico con un fuerte componente genético y cuya sintomatología resulta de la ingestión de la proteína más importante del trigo, cebada, centeno y avena- eliminan el gluten de su dieta. Sin embargo, actualmente, un grupo considerable de personas está optando por una alimentación libre de gluten, por ser considerado más saludable.
Sin embargo, no existe evidencia científica acerca de hasta qué punto la dieta libre de gluten es estricta cuando se trata de grupos que la siguen como opción saludable, tampoco se sabe si tiene efectos adversos a largo plazo, debido a que los alimentos sin gluten poseen mayor cantidad de grasas y/o carbohidratos y son pobres en vitaminas y minerales, ya que no son fortificados.
No hay evidencia científica, pero sí estudios semiclínicos encontrando efecto favorable en sintomatología en patologías como esclerosis múltiple, trastorno del espectro autista, esquizofrenia, trastorno por déficit de atención con hiperactividad, trastornos depresivos, cefaleas, síndrome del intestino irritable, fibromialgia, dermatitis herpetiforme y epilepsia.
No obstante, es necesario realizar más estudios para confirmar una causa – efecto del gluten sobre estas patologías, ya que la gran inmensidad de resultados, poco consistentes y de poca evidencia científica que hemos observado en bases de datos no científicas, está ocasionando que la población general esté orientándose hacia la elección de productos sin gluten, como un patrón de dieta más saludable, sin haber hallado una asociación positiva.