Alonso Retamales Campos
Gobernador (s) Provincial de Los Andes
Sin duda, el Plebiscito del 5 de octubre de 1988 fue un día que marcó un hito en nuestro país con la victoria del NO, reflejo de la conclusión de una lucha de años, tormentosa, peligrosa, que permitió recuperar la democracia.
En dicha jornada, la participación de la ciudadanía evidenció la importancia de una acción que se creía perdida, instancia en la cual se definió el futuro de Chile y que reflejó, en la perspectiva del tiempo, el poder de las personas, de los habitantes de un territorio como el nuestro, al momento de forjar un país que hasta ese entonces vivía bajo la incertidumbre y coartación de los derechos humanos.
Ese día evidenció que la democracia es la clave del progreso de cualquier nación, territorio y, en el caso más próximo, de una comuna, pues los ciudadanos tenemos el poder de escoger de qué forma se dirigirán los caminos que impulsen su desarrollo.
Falta poco menos de tres semanas para las elecciones municipales en Chile, momento en el que la población podrá elegir a sus máximas autoridades y el enfoque que permitirá organizar y regir sus gobiernos locales mediante el principal ejercicio democrático representativo de nuestro país como lo es el sufragio.
Existen muchas razones para votar: mejorar la salud, impulsar la educación, fortalecer la seguridad pública, potenciar políticas de vivienda, estructurar las iniciativas que contribuirán al desarrollo local, entre otros. Por tal razón, es necesario que cada persona vaya a votar, sin importar los estudios o la situación socioeconómica.
Sin democracia no hay debate. Sin debate no existen las propuestas que recojan lo que la ciudadanía siente que debe ser la gestión pública, en mejorar derechos, pero también obligaciones. Es por ello que resulta importante que la gente valore lo que significa el poder de un voto.
El Gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet ha sido enfático en establecer las nuevas reglas del juego para transparentar la información y los procesos de campaña electoral de los candidatos y candidatas, promoviendo la transparencia y relevando una actitud propositiva que permita robustecer la participación democrática, y un ejercicio claro fue el Proceso Constituyente, instancia en que los habitantes del país plasmaron sus opiniones y diversas visiones para la construcción de una Constitución para Chile hecha en democracia.
El 5 de octubre de 1988, los chilenos y chilenas decidieron el futuro del país. En estas elecciones municipales, todos y todas podrán ser parte de un ejercicio democrático fundamental. Como gobernador (s) de la provincia de Los Andes hago un llamado a los ciudadanos y ciudadanas de la provincia que el próximo 23 de octubre vayan a votar y no dejen que otros elijan por ustedes, puesto que así, además de darle legitimidad al proceso, se reflejará el poder de la ciudadanía.