Por: Jorge A. Walters A.
Por lo general, no reparamos en que, la SOCIEDAD HUMANA, en un mundo mercantilista, rara vez es prioridad, porque todo se mide en función del dinero.- En todo orden de cosas, se nos hace creer que, lo relevante, es el difícil financiamiento, la rentabilidad, el crecimiento del PIB, o el per-cápita que, como sabemos, es un invento ingenioso para engañarnos, promediando la desigualdad.- El TENER, a los ojos de los demás, nos hace exitosos… De ahí que, “tanto tienes tanto vales”.- De los Principios y Valores, ni hablar.- Por esta razón, nuestro objetivo principal termina siendo TENER a como de lugar.- Somos como un limón al que, el sistema exprime, luego lo bota, o desecha y en su lugar llega un nuevo limón que correrá la misma suerte.- Vivimos en una supuesta Democracia, en la que, nuestras autoridades, Gobernantes y Parlamentarios, en no pocos casos, tienen intereses comunes con el Poder Económico y por cierto, están más comprometidos, con quienes financiaron sus campañas políticas que, con quienes le dieron su voto.- Los poderosos medios de comunicación, saben manejar a las masas, le muestran el camino que, a ellos conviene y siempre encuentran la forma de tenernos engañados, ignorantes y divididos, discutiendo sobre temas secundarios, o irrelevantes.- Así, todo aquello que, de verdad es importante y de su particular conveniencia, pasa desapercibido, e incluso, a veces termina siendo defendido con pasión, por quienes a la larga, son los más perjudicados.- La política y su probada incompatibilidad con el dinero, por todo lo que ha salido a luz pública y que, de seguro está lejos de terminar, se encuentra en extremo desprestigiada.- Hoy cuesta encontrar alguien en quien confiar.- La credibilidad se ha perdido y quienes postularán a la Presidencia de Chile, como también al Parlamento, en muchos casos, por más que, aseguren que cumplirán con las disposiciones y exigencias legales vigentes, en cuanto a declarar su patrimonio real, ha quedado en evidencia, que aún resultan insuficientes y fáciles de burlar.- Por esta razón, lo que, nos puede evidenciar de mejor forma la calidad humana de los candidatos(as), son su evaluación en los aspectos: ético y moral que, de ser negativos no calificarían para ocupar ningún cargo de Servicio Público, en los que, invariablemente se les debe exigir, muy altos estándares de integridad, de honorabilidad, de honradez , de incorruptibilidad y de credibilidad.- La sociedad chilena se ha ido empoderando y ha tomado cada vez mayor nivel de consciencia de que, es ella la máxima autoridad del país.- El pueblo soberano, conforme a lo dispuesto en la Constitución, sólo delega en sus mandatarios, la ejecución de lo que quiere y se debe cumplir.- Es aquí donde debe quedar en claro que, por importante que pudiera ser el aspecto económico del país.- A quienes nos prometerán mayor crecimiento, mejores empleos, Salud, Previsión, maravillas y cosas irrealizables, debemos recordarles que: “POR SOBRE TODO, SIEMPRE ESTÁ Y ESTARÁ EL SER HUMANO”.-
El Chile del futuro, aquel que, todos quisiéramos, que se haga realidad, requiere que, la actual EDUCACIÓN destinada ex profeso a formar ciudadanos egoístas, consumistas y útiles al sistema mercantilista, cambie drásticamente para formar en el futuro, seres de excelencia: conscientes, cultos, sensibles, generosos, justos, solidarios, ahorrativos, laboriosos y empáticos. Seres caritativos que sientan AMOR por el prójimo y que, en forma sincera y de corazón, al DAR, trasmuten ese frío YO, por un cálido NOSOTROS.-
Maimónides, Médico, Filósofo y Físico, hispano judío (1135-1204) señaló que, los grados del DAR, son los siguientes: El 1er Grado consiste en DAR CON RENUENCIA, o contra nuestra propia voluntad.- Esta es una limosna de mano y no de corazón.- El 2° Grado, es DAR ALEGREMENTE, pero NO en proporción a la necesidad del afectado.- El 3er Grado, consiste en DAR CON ALEGRÍA Y EN PROPORCIÓN, pero, sólo después de serle solicitada la ayuda.- El 4° Grado, es DAR ALEGREMENTE EN PROPORCIÓN Y SIN SERLE SOLICITADO, poniendo sin embargo la limosna en manos del pobre, provocándole una dolorosa emoción de vergüenza.- El 5° Grado, es DAR DE MANERA TAL QUE, EL NECESITADO RECIBE LA LIMOSNA Y SABE QUIEN ES EL BENEFACTOR, sin que este sepa quien la recibe.- El 6° Grado, es SABER QUIENES SE BENEFICIARÍAN DE NUESTRA CARIDAD, sin que ellos lo sepan.- El 7° Grado, es “ DISTRIBUIR LAS LIMOSNAS DE MANERA TAL QUE, NI EL BENEFACTOR SEPA QUIENES SON AYUDADOS, NI ESTOS SEPAN QUIEN LOS AYUDA.- Es lo que hacían nuestros lejanos antepasados, al depositar en la CÁMARA DEL SILENCIO O DE LA NO OSTENTACIÓN, donde los seres sensibles, entregaban generosamente, lo que su corazón les sugería, dinero con el cual, se ayudaba a respetables familias pobres, con igual discreción.- El 8° Grado, era el más meritorio y consistía en ANTICIPAR LA CARIDAD, EVITANDO LA POBREZA, para que, a futuro, cada ser pudiera ganarse la vida y de esta forma, nunca más se viera obligado a extender la mano buscando CARIDAD.- Hagamos votos para que, nuestro(a) próximo(a) Presidente(a) si pretende ser un(a) buen(a) Gobernante, debiera tener como objetivo, alcanzar para su pueblo, con la necesaria generosidad de todo el empresariado, el 8° Grado de CARIDAD, que es el AMOR, por lo justo, por lo bello y lo verdadero.- y para finalizar, no estaría demás que, en nuestro caso particular, nos hagamos también un auto examen y en forma objetiva nos preguntemos y respondamos con sinceridad: ¿ A qué Grado de CARIDAD he llegado en mi evolución como ser humano? … Si Ud. comparte conmigo en alguna medida lo expresado… ¡¡¡QUE ASÍ SEA!!!