El ganadero Claudio González (72) nacido y criado en el sector Campos de Ahumada en la comuna de San Esteban, tuvo que disminuir drásticamente el número de animales que tenía en su predio producto de la prolongada sequía que afecta a la región de Valparaíso, a lo que se sumó el alza de los precios del alimento animal. Ahora cuenta con 10 vacas, 15 cabras, algunos caballos y unas 30 gallinas que espera seguir manteniendo gracias a un innovador proyecto de Forraje Verde Hidropónico (FVH) que instaló en enero pasado y que le ha funcionado a la perfección. Técnica que le permite optimizar el uso del agua y contar con forraje durante todo el año.
Gracias a esta iniciativa actualmente tiene una producción mensual de unos 450 kilos de forraje hidropónico (en invernadero de estructura metálica y 64 bandejas para producción). El módulo funciona con sistema de riego manual por micro aspersión y además posee un estanque de 200 litros y bomba de extracción que le permite reutilizar el agua a través de un sistema de canaletas que lo hace aún más eficiente.
“El sistema ha funcionado muy bien, a los animales les gustó, es un excelente suplemento para su alimentación y con el tambor de 200 litros me alcanza para toda la temporada ya que reutilizamos el agua. Para el invierno nos va a servir harto y tendremos alimento para todos esos meses. Estoy muy contento”, dice Claudio González.
USUARIOS PRODESAL
Esta experiencia es parte del trabajo del área INDAP Los Andes que ejecutó 27 proyectos de inversión, con 4 tipos distintos de módulos de producción de FVH, que beneficiaron a usuarios del Programa de Desarrollo Local (Prodesal) de las comunas de San Esteban, Calle Larga, Los Andes y Rinconada y que demandaron una inversión de 25 millones de pesos
con un incentivo de INDAP de 16 millones, un aporte de Anglo American de 5 millones de pesos y el resto aporte propio de los usuarios.
El sistema FVH permite la producción intensiva de forraje fresco para animales de engorda y consiste en la germinación de granos (semillas de cereales o leguminosas) y su posterior crecimiento bajo condiciones ambientales controladas (luz, temperatura y humedad) en ausencia del suelo. Usualmente se utilizan semillas de avena, cebada, maíz o trigo.
Entre las ventajas de este sistema se encuentran el ahorro de agua (Sistema de riego por micro jet, que minimiza las pérdidas por evapotranspiración); inocuidad del producto (ausencia de plagas y enfermedades); no hay pérdidas, se aprovecha el 100% de la bandeja; rapidez de crecimiento (12-15 días de producción); alta digestibilidad y palatabilidad (grado de aceptación al consumo).
RIEGO AUTOMATIZADO
Otro de los agricultores beneficiados fue Juan Villarroel, de la comuna de Los Andes, que desde fines del año pasado tiene instalado el sistema de FVH con módulo de estructura metálica dispuesto en tres niveles. El nivel inferior es la zona oscura de germinación de semillas, los dos niveles posteriores corresponden a la zona de producción. El sistema de riego funciona de manera automatizada con sensores que miden humedad, temperatura y cantidad de agua en bandejas. Con estas variables el sistema calcula el requerimiento de agua del cultivo de acuerdo a las condiciones climáticas de la zona.
“A mí me funciona bien, incluso quiero ampliar el sistema, necesito más módulos y producir más forraje verde, ya que no es suficiente para las 130 cabritas que tengo actualmente. Siendo bien honesto en este valle es lo que vamos a tener que hacer, porque de otra manera no se puede, aquí ya está todo seco y están subiendo demasiado los costos de alimentación. Esta es una muy buena alternativa para bajar costos. Debiera masificarse aún más este sistema”, afirma.
Este criancero tiene un área efectiva de siembra de avena de 9 metros cuadrados que le permite una producción de 250 kg cada 15 días: “El alimento lo comen las cabras, caballos y a las gallinas les encanta y es un excelente suplemento que complementa el resto de la alimentación”, asegura.
“Estamos apoyando a los usuarios a través de nuestros programas para que puedan fortalecer sus sistemas productivos y este sistema de producción intensiva de forraje es una alternativa que está demostrando ser muy eficiente en zonas de escasez hídrica como la Región de Valparaíso. El sistema tiene un bajo requerimiento hídrico, se produce forraje todo el año y le permite un importante ahorro al bolsillo de los agricultores”, precisó el director regional de INDAP, Fernando Torregrosa.
Al respecto, el gobernador de Los Andes, Sergio Salazar, expresó que “queremos agradecer no sólo la gestión de INDAP de Los Andes que permitió este apoyo a 27 agricultores de la provincia, sino también la capacidad de buscar colaboración y cooperación en el área privada que posibilitó que Anglo American aporte con cerca del 20 por ciento del financiamiento. Esto no sólo contribuye al desarrollo de sus proyectos, sino que, desde la lógica de la sustentabilidad, permite que estos proyectos tengan continuidad en el tiempo”.