El Síndrome Inflamatorio Multisistémico, conocido como PIMS, es un cuadro relacionado con el Covid-19 que afecta a niños y adolescentes. Su pesquisa y tratamiento oportuno son claves para el buen pronóstico del paciente.
Desde el inicio de la pandemia a la fecha, 212 niños y adolescentes han sido diagnosticados con PIMS en el país. Se trata de una patología nueva, cuyos primeros casos aparecieron en mayo del año pasado.
“Desde el área pediátrica este síndrome es muy parecido a lo que conocemos como Enfermedad de Kawasaki, pero tiene algunas variantes. Se produce, básicamente, en pacientes menores de 20 años que hayan tenido o que tienen Covid-19 de manera aguda, o que hayan tenido la infección de manera asintomática”, detalla la doctora Loreto Twele, infectóloga y académica de Medicina de la Universidad San Sebastián.
La especialista explica que esta patología provoca una inflamación de todos los órganos del organismo, lo que genera diversas complicaciones. “Las características clínicas de estos casos refieren a niños y adolescentes que presentan fiebre por más de 3 días, que presentan compromiso gastrointestinal, con vómitos o diarrea, y manifestaciones a nivel de la piel, enrojecimiento en labios e incluso ojos”.
Los casos más graves presentan compromiso neurológico, problemas de coagulación, sangramientos, dificultades cardiacas, hipotensión y taquicardias. Por este motivo “es importante que la consulta se haga de manera precoz, así se ordenan los exámenes de laboratorio que van a mostrar que el organismo está muy inflamado, lo que nos puede llevar a sospechar la presencia de PIMS”.
La doctora Twele explica que el diagnóstico de la enfermedad es sindromático, es decir, que en él confluyen varios antecedentes, como, por ejemplo, “que ese niño haya tenido contacto estrecho con caso de Covid-19 o tener una PCR positiva para el coronavirus, a lo que se suman los signos clínicos de inflamación que van apareciendo”.
En Chile, 3 niños han fallecido a causa de este síndrome desde que inició la pandemia, lo que representa un 1,5% de mortalidad. “Se trata de un porcentaje bajo si se compara con las cifras mundiales, donde se reporta un 3% de letalidad”, detalla la especialista.
TRATAMIENTO Y PREVENCIÓN
Como es una inflamación sistémica, el tratamiento se hace en base a corticoides e inmunoglobulina, terapia inmunosupresora que está disponible en todos los hospitales del país. “El objetivo de estos fármacos es frenar al sistema inmune desatado, estimulado por el Covid. Con estos medicamentos se controla esa reacción”, puntualiza Twele.
Para evitar contraer este síndrome hay que adherir correctamente a las medidas de autocuidado anti Covid. Eso implica el uso correcto de la mascarilla, lavado frecuente de manos, evitar aglomeraciones. “En suma, mientras menos Covid-19 tengamos, menos casos de PIMS habrá”.