Por: Valeria Jorquera, académica Escuela Química y Farmacia U. Andrés Bello
Los meses fríos presentan condiciones ambientales que facilitan la propagación de virus, debido a condiciones como el encierro, la falta de ventilación de los espacios y algunos sistemas de calefacción como la parafina. Los principales mecanismos de contagio son a través de vías como las manos, las secreciones respiratorias al hablar, toser o estornudar
Todos estos fármacos pueden ocasionar Reacciones Adversas a Medicamentos (RAM), lo cual se entienden como una respuesta a un medicamento que es nociva y no intencionada, y que se produce con las dosis utilizadas normalmente en el ser humano. El hecho de que un medicamento no exija presentación de receta para su despacho, no indica que sea inofensivo o se encuentre exento de riesgos, ya que puede tener efectos perjudiciales en ciertos grupos de pacientes.
También el uso sin supervisión médica de fármacos que requieran receta, como antibióticos o antivirales, obtenidos muchas veces en el mercado informal, expone al paciente a graves riesgos de salud. La recomendación a la población es a no automedicarse y siempre ante la compra de un medicamento se recomienda controlar los riesgos con la lectura cuidadosa de los folletos de información contenidos en cada caja de medicamento y consultar siempre como el químico farmacéutico, el profesional de salud más accesible a la población, especialmente con el uso de fármacos de venta directa.
