Se trata de alumnos del Taller de Emprendimiento del Centro Vespertino de Formación Técnica Academia “Perfecto de la Fuente” de Rinconada, quienes gracias a una asociación con la PUCV realizaron una muestra de los productos hechos con material reciclable, los que incluso comenzarán a ser comercializados dentro de la comuna, brindando así una nueva oportunidad de surgir a jóvenes rinconadinos.
RINCONADA.- Centros de mesa, maceteros, percheros y una variada gama de productos del hogar fueron expuestos por los alumnos vespertinos del Centro de Formación Técnica Academia “Perfecto de la Fuente” en Rinconada realizados exclusivamente con desechos como neumáticos, bolsas y botellas, las que de otra forma hubiesen ido a parar a basurales y calles.
Esto gracias a un convenio suscrito entre el establecimiento y la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV) con el que se obtuvieron los fondos, la motivación y las guías académicas para que estos jóvenes incluso puedan vender dichos productos, situación que los tiene entusiasmados con miras a buscar nuevas oportunidades de emprendimiento.
“La idea surgió por el proyecto que propuso el profesor y yo altiro me puse a buscar la idea, como trabajaba con neumáticos, de hacer un cisne hecho con esos mismo neumáticos. La participación ha sido súper buena, siempre me ha gustado participar y esa era la idea. Lograr esto fue una gran satisfacción”, señaló el estudiante de cuarto medio A, Felipe Gutiérrez.
“AlCubo” es el nombre del programa de emprendimiento escolar al que postuló hace dos meses el profesor del Centro de Formación Técnica Academia “Perfecto de la Fuente”, Carlos Montenegro, y que tiene como objetivo a través de PUCV fomentar la cultura e inclusión temprana del emprendimiento, tanto en niños como en jóvenes de enseñanza básica y media de la Región de Valparaíso.
“A los alumnos les hicimos una propuesta de proyecto en la que tenían que trabajar y buscar una problemática que tenían que solucionar en la comuna de Rinconada. Ciertos productos se vinieron dando en un periodo de un mes y medio para justamente abordar problemáticas de la comuna, como por ejemplo, la quema de neumáticos, las bolsas que se botan habitualmente a las calles, los cuales fueron reciclados por los estudiantes e hicieron un producto eficaz para vender como servicio a la comunidad”, señaló el profesor Montenegro.
En tanto, el director del establecimiento, Pablo Castillo, señaló estar orgulloso de sus alumnos gracias a la participación en este tipo de taller a los que seguirá apoyando puesto que “la idea es que ellos puedan tener una opción de trabajo y emprendimiento escolar. Gracias a esto los jóvenes comenzaron a buscar distintas formas de una forma honrada e innovadora”.
“AlCubo” desarrolla cada año los Clubes de Emprendimiento Escolar, que busca que jóvenes y niños de distintos establecimientos educacionales de la región reconozcan y conciban el emprendimiento como una opción válida de desarrollo personal y colectivo. De esta forma la iniciativa ayuda a crear a los alumnos proyectos innovadores, convirtiéndose, al mismo tiempo, en personas empoderadas y conscientes de su entorno.
