Víctimas resultaron con herida penetrante abdominal con evisceración y herida compleja en brazo izquierdo, respectivamente.
La Fiscalía de Los Andes formalizó por dos delitos de homicidio frustrado en calidad de autor al adolescente J.N.M., de 16 años, con domicilio en el sector Centenario; y por un delito de homicidio frustrado en calidad de cómplice a la joven J.C.M., de 18 años, de Primera Quebrada, Camino Internacional, en la causa investigada en la que dos hermanos resultaron gravemente heridos al ser acuchillados en la Plaza de Armas de Los Andes.
Así lo expuso en la audiencia llevada a efecto tras la ampliación de la detención el fiscal Alberto Gertosio y quien solicitó medidas cautelares diferentes para los dos imputados.
Luego de conocer los antecedentes por parte de los intervinientes y dar por acreditados los hechos de la formalización, los delitos de homicidio frustrado y la participación en esta etapa del procedimiento, la magistrado Valeria Crosa resolvió decretar la internación provisoria para el menor de edad en el centro respectivo en la ciudad de Limache, por constituir su libertad un peligro para la seguridad de la sociedad; en tanto que para la mujer el arresto domiciliario nocturno, arraigo nacional y la prohibición absoluta de acercarse a las víctimas.
Conforme a los antecedentes de la carpeta investigativa por las diligencias instruidas y llevadas a cabo por la Brigada de Homicidios de la PDI Los Andes, se pudo establecer que el miércoles 22 del presente mes, alrededor de las 19:30 horas, los hermanos Y.M.V.(23) e I.M.V. (24) se encontraban en la plaza junto a otras personas.
Desde el sector de calle Maipú se acercaron el menor de edad con una pistola en la mano derecha y la mujer con una cadena en sus manos, los que llegaron a un escaño en el sector de la pileta chica por el costado de calle Bernardo O’Higgins. Al verlos, los hermanos se levantaron y uno de ellos, Y.M.V., le pegó un manotazo al arma de fuego, luego los cuatro comenzaron a pelear, los hombres con golpes de puños y la mujer pegando cadenazos a los dos, desplazándose luego hacia calle Santa Rosa.
En un momento la riña se calmó, los involucrados comenzaron a conversar y se dan la mano, instante en el cual J.N.V. extrajo un cuchillo que se lo enterró a Y.M.V en el estómago y lo desplaza hacia el lado, arma con la que también ataca y provoca heridas al hermano I.M.V., para luego huir con la mujer subiéndose a un taxi colectivo. En tanto, los heridos se trasladaron hacia el sector de la pileta chica donde el que recibió la puñalada abdominal se desvaneció, y su hermano sangraba de uno de sus brazos.
Personas que se encontraban en el principal paseo público de la ciudad comenzaron a gritar y a desesperarse, llamando al Samu y concurriendo a dar aviso como a solicitar auxilio al cuartel de la PDI. A los pocos minutos llegaron dos ambulancias, paramédicos que atendieron a los heridos y los trasladaron hasta el Servicio de Urgencia del Hospital San Juan de Dios de Los Andes.
Según el diagnóstico médico, se constató que Y.M.V. resultó con herida penetrante abdominal con evisceración, en tanto que su hermano I.M.V. con herida compleja dorso brazo izquierdo con lesiones en tendones extensores, de carácter graves, quedando ambos hospitalizados.
Respecto a los dos imputados, se estableció que J.N.M. y J.C.M. abordaron un taxi colectivo en calle Santa Rosa a la altura del paradero, trasladándose por calles Santa Rosa, Las Heras y avenida Santa Teresa. Al avanzar por el sector del Mall Espacio Urbano, al vehículo se acercó una camioneta y desde el interior personas apuntaban con armas de fuego, ante lo cual el conductor viró en “U” y se dirigió hasta el estacionamiento de la Tercera Comisaría de Carabineros, donde el conductor del taxi colectivo se percató que eran detectives, solicitándole que apagara el motor y se bajara, indicándole que andaban buscando a los jóvenes que transportaba ya que habían agredido a sujetos en Plaza de Armas, los que fueron detenidos y en el interior de una cartera se encontraron el arma a fogueo y la cadena, en tanto que posteriormente fue encontrado el cuchillo.
El persecutor dio cuenta que el menor de edad había sido formalizado el 20 de agosto de este año en el Juzgado de Garantía de San Felipe por un delito de robo con intimidación y se encontraba con medidas cautelares; mientras que la joven no registraba antecedentes.
También dio lectura a lo declarado por la imputada, quien en parte de lo señalado dijo que la situación había comenzado la semana anterior por el fallecimiento de un muchacho y porque los hermanos los habían golpeado a ambos. Así también, que el día de los hechos habían visto a los hermanos alrededor de las 17:00 horas en la Plaza de Armas donde hubo un altercado menor y que después fueron a la casa del menor desde donde sacaron la pistola a fogueo, el cuchillo y la cadena para “protegerse”, regresando más tarde al centro y donde se produjo el altercado, entregando una versión diferente de los hechos toda vez que los hermanos habían amedrentado al adolescente con un cuchillo y un palo en forma de estaca, junto con golpearlo. Sin embargo, no dio cuenta de las puñaladas y dijo que ante lo sucedido se fueron del lugar en un colectivo pensando que los estaban siguiendo.
La defensora Paola Zapata se opuso a las medidas cautelares calificándolas de “desmedidas y exageradas”, indicando que respecto a la dinámica de los hechos lo único que tenía el Ministerio Público era por la declaración de una joven -que dijo- es amiga y conoce a los hermanos, el otro un trabajador y el conductor del taxi colectivo. Añadió que su representado también tenía heridas cortopunzantes en el tórax y en el glúteo.