Delito ocurrido en agosto de 2014
La Fiscalía de Los Andes logró la imposición de una pena de 15 años y un día de presidio mayor en su grado máximo en contra de Esteban Mauricio Arévalo Sepúlveda, de 36 años, al ser declarado por el Tribunal Oral en lo Penal como autor del delito de robo con intimidación ocurrido la mañana del jueves 28 de agosto de 2014 en la sucursal del Banco Santander ubicada al interior del Puerto Terrestre Los Andes, en la localidad de El Sauce.
Así lo determinaron los magistrados Carolina Escandón Cox, Alex Guzmán Manríquez y María Cornejo Sandoval, luego del juicio desarrollado y que tuvo como intervinientes al fiscal Ricardo Reinoso, el querellante en representación del banco afectado, abogado Rodrigo Álvarez Acevedo, y por la defensoría penal María Isabel Montenegro.
En consideración a la extensión de la condena, ésta deberá cumplirla en forma real y efectiva, sirviéndole de abono el tiempo que se mantuvo ininterrumpidamente privado de libertad con motivo de esta causa desde el mismo día del ilícito.
Asimismo, se decretó el comiso del revólver y municiones que fueron incautados y exhibidos como evidencia material, y de igual modo la pistola a fogueo adaptada calibre 99 milímetros y una vaina, que deberán ser remitidos a los arsenales de guerra para su destrucción. Además, se decretó el comiso de los efectos e instrumentos del delito, y la destrucción y depósito según correspondiere.
También se ordenó la toma de muestras biológicas, a fin de que sea incorporada la huella genética del condenado en el registro respectivo.
El sentenciado fue absuelto de dos delitos por lo que fue acusado por el Ministerio Público, correspondiendo a un robo con intimidación, siendo la supuesta víctima L.V., y de porte ilegal de arma de fuego.
LOS HECHOS
Conforme a los elementos de prueba, declaraciones y evidencias rendidas durante el juicio, los jueces del Tribunal Oral dieron por acreditados que los hechos ocurridos el 28 de agosto de 20014 se gestaron alrededor de las 9:10 horas cuando el ahora condenado, previamente concertado con otros sujetos, llegó hasta el Puerto Terrestre Los Andes a bordo de un vehículo y tres de ellos concurrieron específicamente a la sucursal del Banco Santander, desplegándose en su interior y donde permanecieron por un total de 4 minutos y 28 segundos.
Víctimas del ilícito señalaron que esa mañana tres delincuentes redujeron al vigilante, lo golpearon, le quitaron su arma y los apuntaron con armas de fuego. Al guardia lo obligaron a abrir el blindado de las cajas para entrar al sector donde tienen el dinero, a funcionarios los obligaron a abrir la bóveda, intentaron que abrieran la caja fuerte de la bóveda, pero no se pudo porque se abre en Santiago. Golpearon a la cajera para que abriera con las claves, posteriormente vieron que había pasado mucho tiempo y huyeron con el efectivo que había en las cajas correspondiendo a un monto superior a los $2.000.000 y US$691 en dinero en efectivo, huyendo del lugar en el mismo vehículo que dejan más tarde abandonado en otro sector. Tras ello abordaron otro vehículo, un automóvil Kia Río.
Los antisociales vestían buzos de trabajo, llevaban gorros, lentes de protección de trabajo y pasamontañas.
La sucursal está monitoreada por cámaras de grabación, en Santiago, y quedó todo registrado.
Al transitar por el Camino Internacional, sector Portezuelo Amarillo, Carabineros se percata que los autores huían en el vehículo antes señalado y por lo cual se inicia una persecución hasta calle Los Quilos, lugar donde salen del vehículo para huir en distintas direcciones. El sentenciado, en su huída, ingresó a un domicilio de dicha calle y donde se esconde en el antejardín detrás de la casa de un perro, lugar en la que es sorprendido por los funcionarios de la Tercera Comisaría de Los Andes con especies en su poder, correspondientes a un overol color azul con naranjo y otros elementos que habían sido utilizados para la perpetración del robo, entre ellos y al costado en un macetero, un revolver marca Taurus calibre 32.
