El sujeto se cortó los brazos para evitar ser detenido por Carabineros
Momentos de angustia vivió una mujer adulto mayor, cuando su hijo, quien se encontraba bajo los efectos del alcohol, tomó un cuchillo cocinero amenazándola con quitarle la vida y posteriormente incendiarle el departamento, esto luego de encontrar a su cuñado conversando con su madre.
Los hechos, conforme a los antecedentes policiales, se produjeron alrededor de las 22:30 horas en la Población Alto Aconcagua y se gestaron cuando el sujeto de iniciales J.V.A., llegó hasta el domicilio en el que vivía junto a su progenitora de 87 años.
Al ver la situación y pensar que el cuñado le estaba pidiendo dinero a su mamá, se ofuscó a tal grado de comenzar a insultar a ambos y luego procedió a tomar el arma blanca, manifestando que atacaría a su madre y seguidamente prendería fuego al inmueble para así ocultar lo que sería el asesinato.
Debido a la gravedad de la situación que se estaba produciendo y las decididas intenciones del sujeto, el yerno de la mujer llamó a Carabineros denunciado el episodio de violencia intrafamiliar, por lo que rápidamente al lugar se desplazaron patrullas.
El descontrolado individuo, al escuchar que se solicitaba el auxilio de la policía uniformada, se dirigió a una de las piezas en donde se encerró.
Al hacerse presentes en el departamento, personal de la Tercera Comisaría asistieron a la víctima y luego fueron a ver al hijo de la mujer para arrestarlo, sin embargo al abrir la puerta del dormitorio lo encontraron con sus brazos ensangrentados ya que se había autoinferido cortes con el cuchillo a fin de evitar el arresto, por lo que debió ser trasladado hasta el Servicio de Urgencia del Hospital de Los Andes donde recibió atención, tras lo cual fue detenido.
Ya en la mañana el imputado fue llevado al Juzgado de Garantía, efectuándose la audiencia en la que fue formalizado por el delito de amenazas en el ámbito de violencia intrafamiliar, solicitando el fiscal Alberto Gertosio las medidas cautelares de abandono inmediato del hogar común y la prohibición absoluta de acercarse a su madre, lo que fue acogido y decretado por la magistrado Valeria Crosa que estableció un plazo de investigación de tres meses.