Tomado del libro de Héctor Miranda A. (Libre adaptación)
LOS ANDES DURANTE LA ADMINISTRACION BULNES Y REVOLUCION DE 1851.– La despedida, antes de irse, fue dur e inamistosa. Su altivez lo llevó a enemistarse con el señor Rodríguez, subdelegado de Los Andes, que no se avino con el señor Sarmiento. Se cuenta que ante las descortesías del funcionario andino, el arisco visitante le habría respondido con estas fuertes y proféticas palabras: «Señor, llegará el tiempo en que Ud. tendrá que quitarse el sombrero para hablar conmigo».
No pasaron diez años y el argentino volvió a la villa. Después de desempeñar variados oficios, en 1837 estaba de nuevo en San Juan, donde continuó sus estudios y aprendió italiano. En noviembre de 1840, volvieron para él los tenebrosos días de la prisión; el 8 de ese mes fue encarcelado por opositor.Transcurrieron algunos días y, una noche, un grupo de soldados borrachos lo sacó de la prisión y lo hizo víctima de toda clase de ultrajes, hasta que, ante la presión de la madre de don Domingo Faustino, el gobernador lo arrebató a sus atacantes.
