Tomado del libro de Bernardo Cruz A. (Libre adaptación)
DISTINTOS CAMINOS ENTRE O’HIGGINS Y CARRERA.- Ese día llegaban también a las villas de Aconcagua 1.200 mulas cargadas de pertrechos, armamento y vestuario, que, por orden de Carrera seguirían a Coquimbo.
El capitán Barnechea, el 4 de octubre llegó a San Felipe, a cargo de una recua que portaba $ 300.000 del erario fiscal y, en la ciudad se detuvo esperando nuevas órdenes del Director Supremo.
Esa misma tarde, Carrera salió de Santiago con los restos de la III División, rumbo a Aconcagua. Don Vicente Pérez Rosales refiere que, esa noche » don José Miguel Carrera tuvo una conferencia, en casa de mis padres, con mi abuelo Rosales, para tranquilizarlo, asegurándole que la desgracia de Rancagua no era definitiva, puesto que, en pocos días más, rehecho en Aconcagua, volvería a arrojar a los españoles de Santiago.