Tomado del libro de Bernardo Cruz A. (Libre adaptación)
SAN MARTIN COMIENZA A PREPARAR EL EJERCITO LIBERTADOR.- Tras la Cordillera de los Andes, San Martín lenta pero metódicamente ha ido preparando en el campamento de Plumerillo los ejércitos de la Reconquista. Pero los sables y las tercerolas, cañones y plomos no bastaban. Es menester ablandar la futura resistencia, actuar, como calentando el hierro, para el momento en que se le martille en el yunque. Hay que encender los espíritus con la idea de la Patria, hacer previamente amar la libertad y la república; hay que dilatar las esperanzas en unos y sembrar el temor en los otros.
Tres propósitos impulsaron las guerrillas: espíar las evoluciones, la moral y los efectivos de las tropas realistas que guarnicionaban, desde Coquimbo al Maule; exacerbar el odio y la violencia contra San Bruno y sus Talaveras, al mismo tiempo que encender el amor a la república y, en tercer lugar, dividir los efectivos de Marcó del Pont en varios puntos del territorio, propagando noticias de una simultánea invasión por varios boquetes cordilleranos.