Jefe de unidad destacó los beneficios que el deporte entrega a la población penal de la unidad.
En las cárceles, al igual que en el exterior, el fútbol es el deporte rey. Sin embargo, en el Centro de Cumplimiento Penitenciario de Los Andes esto está cambiando gracias a Juan Montenegro, ex vicepresidente de la Asociación de Vóleibol de Chile.
En la actualidad el concejal andino lleva poco más de un mes realizando un taller de vóleibol al interior del establecimiento penitenciario y ya son más de 20 los internos que decidieron cambiaron los goles y atajadas por las recepciones y remaches. La iniciativa semana a semana cobra más fuerza y el número de participantes ha aumentado paulatinamente.
Juan Montenegro, quien comenzó a practicar esta disciplina cuando era un niño, se muestra agradecido de la oportunidad de poder compartir sus conocimientos con quienes se encuentran privados de libertad.
Además, el ex voleibolista local destacó que uno de sus deseos es que: “de aquí a dos meses más es traer a un equipo de varones de la asociación de vóleibol de Los Andes y que vengan a pasar una tarde agradable y jugar con ello y que compartan”.
El entusiasmo demostrado por los reclusos queda graficado en las palabras de Carlos Soto, quien agradece la oportunidad y espera que iniciativas como esta se repitan.
“Para nosotros ha sido una oportunidad porque se necesitaba esto para botar un poco de stress. Hay hartas personas interesadas en participar en esto. Uno necesita esto para poder pensar en otras cosas. Agradecido de lo que están haciendo. Estoy contento porque el profe ha sido buena tela con nosotros, nos acoge como un amigo”.
“Nos gusta practicar y mejorar. Queremos formar una selección y así ver la posibilidad de jugar contra otros equipos”, añadió Soto.
Sin duda el deporte es una herramienta que permite mejorar la conducta de quienes se encuentran privados de libertad y ayuda en la reinserción social de los mismos. Así lo afirmó el jefe del CCP andino, teniente coronel Cristian Farías.
“Como unidad siempre buscamos entregar la mayor cantidad de herramientas posibles para nuestros internos en materia de reinserción y el deporte es una de ellas. Por medio del deporte logramos mejorar la conducta de la población penal y disminuimos el stress tan propio de los establecimientos penitenciarios”.
El taller se extenderá hasta noviembre, pero el éxito de la iniciativa y sobre todo el compromiso del profesor y de los internos han llevado a que ya se esté pensando en continuar el próximo año.