“La Cruz del Mirador” es el nombre que recibió este nuevo monumento que se puso a disposición de los vecinos del Valle de Aconcagua y de Chacabuco, emplazado en el punto más alto de la cuesta del mismo nombre, proyecto que se comenzó a gestar hace un año en medio de las celebraciones del Bicentenario del paso del Ejército Libertador de los Andes, y cuya ceremonia de inauguración fue encabezada por los alcaldes de Rinconada y Colina, comunas que cofinanciaron su construcción, junto a la Corporación de Patrimonio del Ejército.
“Estamos felices porque llegó el día en que inauguramos la Cruz del Mirador. Una cruz maravillosa e iluminada en este cerro y estamos entre contentos, orgullosos, satisfechos, y no sé qué otro adjetivo poder decir porque en realidad es un momento muy especial, no pensé que lo íbamos a lograr y gracias al alcalde Pedro Caballería de Rinconada de Los Andes, al escultor y todos los que trabajaron en que esto sea una realidad”, indicó el alcalde de Colina, Mario Olavarria.
El monumento, que tuvo un costo total de 80 millones de pesos, se encuentra emplazado con vista al primer Monumento de esta gesta en la Carretera San Martín, y a los valles de Chacabuco y de Aconcagua, en un lugar donde además pasan los más de 60 mil jóvenes que año a año realizan la peregrinación al Santuario de Auco, por lo que cuenta con áreas verdes y de descanso para este propósito, y ser utilizado además como punto turístico en la zona.
“Acá hay tradición, hay historia y hay cultura, a pocos metros tenemos el Monumento Chacabuco por donde pasó el Ejército de los Andes. Para nosotros los cristianos también tiene un significado muy importante la cruz y además por acá pasan en el aniversario de Teresita de Los Andes más de 60 mil jóvenes en una hermosa peregrinación. El valor histórico es incalculable, creo que debemos trabajar en esa línea para rescatar muchos lugares y que los jóvenes vayan conociendo nuestra historia”, señaló el alcalde de Rinconada, Pedro Caballería, quien además agradeció la alianza realizada con la Municipalidad de Colina como símbolo de integración.
La Cruz, de 18 metros de alto, es obra del escultor chileno Cristian Salineros, quien se inspiró en la universalidad del símbolo cristiano para que pueda ser apropiado por todos los visitantes, contando además con un sistema de iluminación interior que al caer la noche simula el efecto de estar levitando en la cima del cerro donde se encuentra emplazada.
Junto con la bendición del Obispo de San Felipe, Cristian Contreras, “La Cruz del Mirador” quedó abierta a la comunidad como un nuevo punto histórico, cultural y natural en lo que es el inicio del Valle de Aconcagua como parte de una serie de hitos que desde el año pasado conmemoran la gesta heroica del Ejército Libertador de los Andes que consagró en 1818 la independencia de Chile.