Por Octavio Arellano, concejal de Los Andes.
Uno de los problemas de quienes legislan desde un escritorio, es que creen que las ciudades de Chile son parecidas a Santiago, y no alcanzan a visualizar las enormes diferencias de infraestructura vial y recursos que existen en nuestras comunas, lo que se acentúa mientras más alejadas se encuentran de la capital: craso error. Ello porque la ley 21.088 denominada de “Convivencia Vial” que entra en vigencia el próximo domingo 11 de noviembre, establece, entre otras materias, que los ciclistas solo podrán circular por ciclovías o por las calles o calzadas, limitando el uso de las veredas para los de los menores de 7 años que circulen acompañados, los menores de 14 años que lo hagan sin acompañante, además de personas de la tercera edad y aquellas con movilidad reducida.
Aún cuando reconocemos que esta es avance, especialmente en los resguardos del peatón o el fortalecimiento de la seguridad de los ciclistas al exigir el uso de luces atrás y adelante y ropa reflectante, al igual que obliga el uso de sillas y carros de arrastre con estándares mínimos para el traslado de menores, creemos que indirectamente se está lanzando a los ciclistas a una verdadera ley de la selva con automóviles y camiones, ya que las calles no están habilitadas en ciclovías.
LOS ANDES “O” KILOMETROS DE CICLOVIA
¿Sabe Ud. cuantos kilómetros de ciclovía hay en Los Andes? La respuesta es cero kilómetros, lo que me lleva a pensar que esta ley será una amenaza para quienes desde ahora deberán circular por calles atochadas de automóviles y camiones, ya que está pensada solo para ciertas ciudades que han hecho inversión en ciclovías, que no es el caso de Los Andes. Es legítimo pensar que se podría si esta norma podría desmotivar el uso de la bicicleta y a la vez incentivar el incremento del parque automotriz, lo que va contra el elemental principio de propiciar medios de transporte limpios, no contaminante, de bajo costo y que contribuyan a mejorar la calidad de vida de los habitantes. En carne propia he podido comprobar que en Los Andes, los conductores son poco respetuosos de ciclistas y peatones, aún transitada por grandes camiones de carga internacional o abastecedores de los grandes centros comerciales, que nos colocan a quienes preferimos la bicicleta, en una situación de riesgos de daños graves o fatales para el ciclista.
Según fuentes del propio Ministerio de Transportes, solo durante el año 2017, la bicicleta participó en 3.853 accidentes de tránsito, y en ellos resultaron 95 ciclistas fallecidos y 3.236 lesionados. En la última década fallecieron 1.183 ciclistas en accidentes de tránsito.
¿De qué “convivencia” o seguridad vial estamos hablando entonces?
QUIENES HAN OPTADO POR UN TRANSPORTE LIMPIO Y SANO COMO LA BICICLETA, NECESITAN NUESTRO APOYO
Es urgente que la comunidad andina se haga cargo de esta situación y junto a sus autoridades, implementemos acciones preventivas que en el mediano y largo plazo se constituyan en soluciones definitivas. Para ello proponemos la inmediata implementación y demarcación de ciclovías sobre la berma o bandejón central de las cuatro avenidas de la ciudad, donde existe espacio disponible y no se afectan a los peatones; se diseñen e implementen mediante demarcación de ciclovías desde la población Alto Aconcagua, Jardines Familiares, Los Villares y Cacique Vitacura hasta el centro de la ciudad. Dentro de la trama urbana, dentro de las cuatro avenidas solicitamos a la municipalidad, la habilitación de una ciclovía urbana en sentido Norte-Sur y Oriente-Poniente, destinando para ello las calles Yerbas Buenas y Freire, mediante tachas demarcatorias sobre la calzada, trasladando los estacionamientos de parquímetros y permitiendo la circulación vehicular expedita. Igualmente, creeemos urgente, decretar desde ya, la prohibición de la circulación de camiones de carga internacional sobre 10 toneladas por el radio urbano de la comuna y se clausuren los estacionamientos ilegales que existen en el radio urbano y que provocan el tránsito de camiones internacionales, a pesar de existir la Ruta Ch-60 por el borderío y el by pass por El Sauce. Ya no existe justificación para que la autoridad alcaldicia dilate una ilegalidad sancionada en el Plan Regulador, en lo cual hemos insistido ante el Concejo Municipal, sin resultados positivos hasta la fecha.
HAY QUE PRECAVER AHORA Y NO LAMENTAR MAÑANA
Definitivamente, con esta ley debemos avanzar en un mediano plazo a la peatonalización parcial de los tramos comerciales de las calles Esmeralda y Maipú, en que se amplíen las veredas y se conserve una vía de circulación, potenciando de esta manera la importancia de la seguridad de los peatones y el fortalecimiento del comercio minorista del centro de la ciudad frente a la amenaza de los grandes centros comerciales. De igual modo, resulta indispensable volver a insistir que se hace inviable para la ciudad el proyecto de estacionamientos bajo la Plaza de Armas, diseñado hace más de 10 años, el que sólo provocará mayor congestión en el centro y que silenciosamente sigue avanzando en el sistema de evaluación ambiental, a pesar que más de 8.000 andinos hemos firmado en contra del cambio de destino de la Plaza de Armas de una zona de esparcimiento ciudadano a un depósito de autos, causa en la que seguiremos insistiendo para que no se ejecute.
Es urgente para las autoridades precaver se exponga a riegos de accidentes a nuestros vecinos, especialmente a los trabajadores y a los jóvenes, que prefieren circular en bicicleta por las calzadas de nuestra ciudad, las que no están demarcadas adecuadamente. Esta tarea es para hoy y no para mañana”.