Durante el 2015, como Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol (SENDA), hemos realizado una serie de iniciativas que nos han permitido fortalecer el trabajo regional en torno a la Prevención y a las necesidades de tratamiento.
Es así como en el área Educación hemos comprometido a las comunidades escolares, es decir, directivos, docentes, apoderados y alumnos de 106 establecimientos educacionales de la región lo que nos ha permitido llegar a 45.573 niños, niñas y adolescentes, instalando de esta forma un sistema de prevención integral que no solo aborda temas asociados al consumo sino también aportando herramientas que les permitan desarrollarse como personas.
En los espacios laborales, a través de nuestro programa Trabajar con Calidad de Vida, hemos apoyado la elaboración de Políticas de Prevención en 47 instituciones, tanto públicas como privadas, llegando de esta forma a más 13.000 trabajadores de nuestra región.
Hemos potenciado la presencia en el territorio a través del trabajo coordinado que realizamos con 32 Municipios de nuestra región, y que en los próximos años buscaremos fortalecer a través del fortalecimiento de los SENDA Previene en tu comuna.
Más de 2000 personas tuvieron acceso a nuestros programas de tratamiento en sus diversas modalidades, aumentando de esta forma en un 10% las atenciones respecto el 2014 y junto con esto hemos asumido la responsabilidad no solo de entregar rehabilitación, sino de recuperar a las personas lo que implica generar también dispositivos que permitan la integración social de quienes terminan su proceso de rehabilitación.
Dentro del marco del Programa Control 0 Alcohol se realizaron más de 13.000 controles en conjunto con Carabineros, disminuyendo en un 40% la detección de personas en estados de ebriedad.
Sin embargo aún nos queda mucho por hacer, nuestro país tiene los índices más altos de consumo de alcohol en Latinoamérica. El último informe de la OMS nos revela que en promedio los chilenos bebemos aproximadamente 9,7 litros de alcohol puro al año, sin embargo tenemos una práctica que es aún más riesgosa: los “atracones de alcohol”, es decir, no bebemos todos los días, sin embargo cuando lo hacemos, lo hacemos sin poner límites. Y lamentablemente esta práctica tan común en los adultos, también se ha normalizado en nuestros hij@s, niet@s, sobrin@s. Entre los adolescentes que consumen alcohol el promedio de consumo es de 8 tragos por salida.
En este sentido no solo basta con los esfuerzos que podamos hacer como Gobierno, sino necesitamos comprometer en esta tarea principalmente a las familias y a la comunidad en general. Una de las principales tareas como adultos es tener las herramientas adecuadas y estar disponibles para conversar sobre los riesgos del alcohol y las drogas con nuestros niñ@s y adolescentes, y como Gobierno de Chile, a través de SENDA, vamos a estar disponible para seguir generando estas herramientas para ustedes.
Las políticas de prevención más eficientes son aquellas que incluyen acciones a nivel familiar, escolar, comunitario y ciudadano y se orientan a mejorar la calidad de vida de la comunidad… por esto la prevención es responsabilidad de Tod@s… Tod@s por Chile.