Autor: Gonzalo Maier
Este libro confirma algo que muchos intuyen: la vida, en realidad, se lleva en los bolsillos. Desde la billetera hasta las llaves de casa, pasando por servilletas olvidadas o una dirección escrita en un papel muy arrugado, los objetos que hay en los bolsillos tienen el poder de delatar incluso a los más reservados. Un inventario personal y por lo tanto caprichoso en el que se suceden sorprendentes postales cotidianas -un auténtico gabinete de curiosidades- dedicadas a celebrar la vida privada de objetos comunes y corrientes que de tan cercanos se confunden con la propia biografía.
Este libro confirma algo que muchos intuyen: la vida, en realidad, se lleva en los bolsillos. Desde la billetera hasta las llaves de casa, pasando por servilletas olvidadas o una dirección escrita en un papel muy arrugado, los objetos que hay en los bolsillos tienen el poder de delatar incluso a los más reservados. Un inventario personal y por lo tanto caprichoso en el que se suceden sorprendentes postales cotidianas -un auténtico gabinete de curiosidades- dedicadas a celebrar la vida privada de objetos comunes y corrientes que de tan cercanos se confunden con la propia biografía.
La selección que hace Maier del contenido de sus bolsillos -histórico, por cierto, desde el mapa del tesoro en la playa hasta papelitos con direcciones que tienen una vida fugaz- es completa y definitivamente arbitraria. Y ahí radica lo más atractivo del libro, en la veta lúdica que lo lleva de un tema a otro, y que deja, claro está, entrever un recorrido biográfico que pasa por Punta Arenas, Santiago, Holanda y Berlín, entre otros puntos, donde Maier defiende a Salgari -no vayamos a avergonzarnos de las lecturas que de niños nos hicieron felices- y aboga por escuelas de literatura creativa que enseñen a sobrevivir más que a escribir. Claro, porque hay oficios que están más expuestos que otros a las arbitrariedades del azar, y entonces es mejor que se sepa qué tener en los bolsillos en caso de emergencia, de esas emergencias contemporáneas que no son terremotos o inundaciones, sino el repentino aviso de que estás sin trabajo.
Biblioteca Municipal de Los Andes
Independencia 594 fono 34-424432