AUTOR: HERNÁN RIVERA LETELIER
A días de iniciada la demolición de la ex cárcel de Antofagasta, un túnel que conecta el recinto penitenciario con la ciudad sale a la luz. La noticia sorprende a las autoridades -nunca en la historia del penal se supo de una fuga subterránea- y gatilla una nueva visita de la viuda del teniente de ejército Arturo Calderón Iriarte a la oficina de los investigadores. Según la arrogante mujer, el túnel se relaciona con la desaparición de su marido, ocurrida hace ya cuarenta años.
En la oficina del Tira Gutiérrez todo había estado muy tranquilo, no le había llegado un caso emocionante desde lo ocurrido con el muertito, pero este día del descubrimiento del túnel, llega doña Magallánica Suárez quien había ido 6 meses antes a solicitar el descubrimiento del paradero de su esposo pero jamás llegó a concretar nada. Su marido había desaparecido hace 40 años, nunca se supo qué pasó con él. Tampoco era un gran esposo, es por esto que algo mucho más importante hizo que esta señora quisiera averiguar, al fin, donde estaba realmente, tal vez sólo se había ido de viaje y regresaría en cualquier momento.
En La muerte tiene olor a pachulí, el autor nos presenta a sus carismáticos protagonistas frente a la resolución de un nuevo caso que los sacará de la ciudad de Antofagasta pero que mantiene el escenario donde Rivera Letelier se mueve con soltura, el norte del país, y donde aprovecha para mostrarnos un mundo popular y temas de contingencia