Nuestro voto es fundamental, no dejemos que las minorías elijan el destino de nuestro país. Es preocupante el porcentaje cada vez más alto de abstención en la toma de decisiones, no da lo mismo quien gobierne, quien nos represente o quien ejerza nuestros mandatos. En una sociedad organizada es imprescindible un permanente contacto con nuestros pares, porque nuestras opiniones deben ser expresadas para hacer los cambios que nuestra sociedad necesita para ser más justa e igualitaria.
Por una parte, existen algunas obligaciones que tiene el individuo hacia la comunidad y, por otra, la comunidad garantiza a los individuos ciertos derechos que les permiten vivir respetando su libertad. Hay una relación entre lo individual y lo social que se manifiesta en los llamados derechos y deberes ciudadanos.
Toda persona, hombre o mujer, independientemente de su religión, edad, sexo o grupo social al que pertenezca tiene derechos que deben ser respetados por el Estado. Estos derechos, que son conocidos como derechos humanos, son innatos e inherentes a las personas, es decir, se poseen por el solo hecho de ser persona. Además, son anteriores al ordenamiento jurídico de un Estado y resultan inalienables e inviolables, ya que están en la naturaleza misma del ser humano.
Vecinos y Vecinas del Valle de Aconcagua, no nos auto marginemos de nuestras responsabilidades, ya que al manifestar nuestro voto, estamos ejerciendo nuestros deberes y derechos ciudadanos.
María Victoria Rodríguez
Siempre Contigo.
