Madre de la niña denuncia discriminación
La menor Florencia Castro Silva ha sido rechazada dos veces por el Liceo Santa Clara de avenida Perú por tener una patología conocida como diplejía espástica que la mantiene en silla de ruedas, razón por la cual su madre Karina Silva Perri interpuso una denuncia por discriminación en la Superintendencia de Educación contra la sostenedora y director de dicho establecimiento educacional.
La menor, actualmente integrante de la academia Babochito Los Andes del Bafochi, ha intentado dos veces ingresar a kínder en dicho liceo pero se le ha denegado la posibilidad por problemas de infraestructura y no tener personal idónea para atender a una menor en silla de ruedas.
“NO ESTABA APTO PARA SILLA DE RUEDAS”
Karina dijo que su hija, actualmente de 4 años, “tiene diplejía espástica que no le permite mover sus piernas, pero lo demás no tiene ningún problema. Actualmente está cursando pre kínder en el jardín de villa El Horizonte, y ella pretendía ingresarla al Liceo Santa Clara a Kinder el próximo año. Ha sido rechazada en dos oportunidades por estar en silla de ruedas. Me dijeron que el colegio no estaba apto para silla de ruedas, las salas no estaban aptas. Ella no va a usar silla de ruedas en la sala de clases, la usará solamente para traslado. Necesito una profesora que la lleve solamente al baño, nada más, pero me negaron matricula porque me dijeron que ella necesitaba psicólogo y ellos no tenían como para cancelar profesores aparte solamente para la Florencia, lo cual ella no necesita porque ella tiene todas sus capacidades intelectuales en perfectas condiciones, solo tiene problema en sus piernas, es un impedimento físico nada más”, dijo.
“NO ES JUSTO”
Karina Silva calificó como injusto este rechazo por parte del establecimiento. “Antiguamente tenían inclusión porque hay un ascensor que los mismo niños echaron a perder, pero no encuentro justo tener que pasar con esto con mi hija”.
DENUNCIA A SUPERINTENDENCIA DE EDUCACIÓN
La madre de la menor presentó una denuncia ante la Superintendencia de Educación de Valparaíso, y la semana pasada el caso de su hija a la OPD “porque no puede quedar esto impune, porque dos rechazos es injusto y llegaré hasta las últimas instancias por mi hija porque no puede ser rechazada, todos tenemos derecho a la inclusión”.
“SE DIO CUENTA”
Lo más lamentable, dijo la atribulada madre, que su hija se ha dado cuenta que ha sido rechazada por estar en silla de ruedas. “Ella quería ir a ese establecimiento porque su hermana mayor estudia en ese liceo y el rechazo le ha causado daño”.
RECHAZO ABSOLUTO
Karina Silva el año pasado era dirigente del directorio del Centro de Padres del curso de su hija mayor. En una de las reuniones “hablé con la Madre por el caso de mi hija menor y me dijo que no había ningún problema, pero cuando la fui a matricular por primera vez me la rechazaron inmediatamente, fue un rechazo absoluto, sin previo estudio del caso. Después pedí una entrevista con el señor Vicencio y ella, y justo la Madre tenía que ir al dentista, no me dieron la posibilidad de hablar con ella. Ahora nuevamente me tocó con el señor Vicencio y nuevamente me dio un rotundo no”.
ESCUELA CASARINO LE ABRIÓ LAS PUERTAS
Ante tanto rechazo finalmente su madre recurrió al Colegio Humberto Casarino de Centenario en el cual le otorgaron sin problemas la matricula para que curse kínder el próximo año, “me la acogieron súper bien, incluso su hermana mayor se irá con ella. Este colegio está totalmente adaptado para cumplir con todas las normas de la inclusión y con personal adecuado. Hasta me hicieron firmar un documento mediante el cual yo autorizo que una profesora vaya con ella al baño”, señaló.