En la tarde de ayer jueves se constituyó en el Cementerio Parroquial de Los Andes el ministro de la Corte de Apelaciones de Valparaíso, Jaime Arancibia, con la finalidad de investigar la aparición de osamentas que corresponderían a cuerpos de cuatro presuntos detenidos desaparecidos que habrían sido inhumados de manera irregular y bajo amenaza durante el régimen de la Junta Militar.
En la diligencia el ministro Arancibia estuvo acompañado por efectivos de la Brigada de Derechos Humanos de la PDI Metropolitana y contó con la colaboración de testigos de la época cuando fueron sepultados cuatro cuerpos en el camposanto andino.
El ministro Arancibia y detectives de la PDI, junto a dos ex trabajadores del cementerio y uno en servicio activo, recorrieron dos sepulturas, un nicho, el sector nuevo del cementerio y el mausoleo de Lourdes donde existe un depósito de restos óseos. Observaron, recogieron antecedentes y testimonios en el lugar.
DENUNCIA ENTREGADA AL EX ALCALDE ARELLANO
La diligencia por eventuales ejecutados políticos enterrados ilegalmente en el cementerio local se llevó a afecto luego de conocerse los testimonios entregados el año 1999 por dos sepultureros y un panteonero al alcalde de la época y actual concejal Octavio Arellano Zelaya.
En este contexto Arellano, junto al fotógrafo Marcelo Mella y el secretario municipal de la época, Luis Rojas, concurrieron al camposanto para conocer en terreno, junto a los testigos, estos descubrimientos.
PRIMER CASO: CUERPO AMARRADO Y ENSACADO
En el denominado Cuadro de Caridad, al fondo en el cementerio sector norte, se descubre el primer caso con fecha estimada del año 1985.
El maestro albañil Héctor Donoso Avendaño, al encontrarse haciendo una excavación para construir una bóveda de sepultura, al llegar a una profundidad de 1 metro 20 centímetros, encontró un cuerpo de una persona de sexo masculino, amarrado de pies y manos con alambre y en una clara posición fetal y dentro de un saco. Este cuerpo fue reducido y llevado a la fosa común del mausoleo de Lourdes, en el mismo cementerio.
SEGUNDO CASO: TAMBIEN AMARRADO Y ENVUELTO
El descubrimiento del segundo caso tiene una fecha estimada entre 1985 y 1990.
El sepulturero Luis Berríos, haciendo una excavación para una sepultura, encontró una persona envuelta en frazadas, amarrado de pies y manos y envuelto en alambres de pies a cabeza. Redujo su cuerpo y una vez sepultado el nuevo cadáver, depositó los restos desconocidos por los costados del ataúd.
TERCER CASO
El tercer caso corresponde al descubrimiento de osamentas en una fecha estimada entre 1985 y 1990.
El mismo Luis Berríos cavando una sepultura, en el mismo sector, se encontró con una persona ahorcada en un yugo de madera con un sistema de pernos tipo mariposa. Este cuerpo también se redujo y se depositó en la misma sepultura.
CUARTO CASO: BAJO AMENAZA DE ARMAS
El cuarto caso tiene fecha del 14 de septiembre de 1973, en un nicho de la Serie 21, costado poniente del cementerio.
Jobo Maturana Contreras, panteonero, encontrándose en dicho lugar en la fecha señalada, llegó un piquete de militares quienes le ordenaron, bajo amenaza, que sepultara en dicho lugar un cadáver sin cumplir con los trámites de rigor. Ante esta situación de amenaza directa, pues era encañonado por un militar, procedió a sepultar el cuerpo. Por la situación que hoy presenta ese nicho, se estima que posteriormente la situación de ingreso podría haber sido “regularizada”, ya que ahora cuenta con lápida de identificación bajo el nombre de Juan Ramón Órdenes Torres.
DURANTE TOQUE DE QUEDA ERA SACADO “A PASEAR”
El mismo panteonero informa que en otras ocasiones existiendo toque de queda fue sacado del cementerio por patrullas de Carabineros y fue paseado durante varias horas sin destino fijo por la ciudad y luego era dejado en su casa, quedando el cementerio a disposición de la fuerzas de orden y militares. Dijo que desconocía lo que se hacía en su ausencia en el cementerio.
PODRÍA HABER MÁS RESTOS
Los restos en el cuadro de Caridad fueron encontrados por casualidad, presumiéndose que pueda haber más osamentas en ese sector.
POR TEMOR
Respecto a por qué no informaron de estos hallazgos en su momento, los testigos manifestaron que fue por temor, y dado que las condiciones no estaban dadas decidieron guardar absoluto silencio de estos hechos anormales.
HECHOS INFORMADOS AL OBISPADO
El actual concejal Octavio Arellano Zelaya, señaló que “el 9 de julio de 2000, mientras me desempeñaba como alcalde de Los Andes, puse en conocimiento del Obispado de Aconcagua, con motivo de la apertura de la Mesa de Diálogo que convocó la Iglesia Chilena, información que recibí de personal del cementerio en relación con el hallazgo de osamentas de personas que evidenciaban haber sido objeto de apremios ilegítimos y que se presumían podían pertenecer a personas Detenidas y Desaparecidos. Ello sirvió de base para la apertura de una causa judicial penal por la Sala de Derechos Humanos de la Corte de Apelaciones de Valparaíso, por supuestas inhumaciones ilegales en el Cementerio Parroquial de Los Andes. La información me fue entregada en entrevistas sostenidas personalmente por los funcionarios del cementerio de aquella época Jobo Ahumada, Héctor Donoso y Luis Berrios, quienes relataron haber efectuado el hallazgo de al menos cuatro casos de personas sepultadas, mientras realizaban movimientos de tierra. Ellos comentaron que los cuerpos estaban amarrados con alambres y envueltos en sacos”.
REAPERTURA DEL CASO
Arellano agregó que “hace aproximadamente dos meses, fui citado por el Ministro Jaime Arancibia, quien está a cargo de la investigación, a quien relaté la forma cómo me enteré de estos hallazgos y las demás personas que estaban en conocimiento de los mismos”, concluyó Arellano.
MINISTRO INVESTIGA CINCO CASOS
El ministro Arancibia al término del procedimiento en el cementerio local, manifestó que “se están realizando diligencias respecto a las denuncias que se hicieron en su momento. Estas diligencias forman parte de esa investigación”.
Señaló que en el Cementerio Parroquial de Los Andes se están investigando 5 casos, “de los cuales hasta el momento no sabemos si se trata de detenidos desaparecidos hasta que concluyan las investigaciones”.
Las indagaciones realizadas ayer las calificó de satisfactorias, y adelantó que se “vienen otras diligencias que se tendrán que decretar en el curso de la investigación, las cuales no se pueden señalar en este momento. Tengo que evaluar los antecedentes y en base a eso resolver que diligencias vienen”
Respecto a una probable exhumación de restos, el ministro dio que no se descarta ordenar este tipo de diligencias. “En una investigación todas las diligencias son posibles”.
FIJACION DE LUGARES
Las primeras diligencias consistieron en fijar los lugares donde se señalan que existen estos restos.
Respecto a las circunstancias en que llegaron estos cuerpos al Cementerio de Los Andes, y si fueron ejecutados en otro lugar y luego traídos al camposanto para su sepultación, el ministro Arancibia señaló que esa información es objeto de investigación.
Por último señaló que en este momento no es posible saber cuándo estará concluida la investigación, y que corresponde a casos nuevos de denuncias de detenidos desaparecidos.
