Octavio Arellano Z., Concejal y ex Alcalde de Los Andes
Nos parece de la máxima gravedad y un riego para la Región de Aconcagua y el país, las denuncias que hemos recibido en el Concejo Municipal sobre instrucciones dadas al SAG para que disminuya la revisión fito y zoosanitario y el aforo físico de camiones en el Puerto Terrestre de El Sauce provenientes de los países vecinos. Creemos que dicha medida tiene tres causas ya conocidas. En primer lugar la decisión del Gobierno de Piñera de disminuir costos por pago de horas de trabajo al personal fiscalización, ya que los controles deben hacerse durante las 24 hrs, en segundo lugar, y no nos extrañaría, algún interés en favorecer el establecimiento de almacenes de depósito de carga en los alrededores de Santiago, situación que no es nueva, según ocurrió hace algunos años, en que debimos movilizamos toda la comunidad andina para evitar dicho riego para la comuna. Sin embargo, en tercer lugar, está la presión de los grandes consorcios camioneros argentinos y brasileños, que están presionando por la baja de costos por concepto de pago de estadía y estacionamiento en las zonas aduaneras y extraportuarias de Los Andes: para ellos, ojalá no exista revisión ni controles. Algunos empresarios de camiones buscan evitar el pago de viáticos de alojamiento de sus choferes, lo que como contrapartida, los expone a asaltos y robos al tener que pernoctar en los camiones en las bermas de los caminos y no ingresar sus vehículos a las áreas de estacionamiento destinadas a tales fines.
ESTA ES UNA AMENAZA AL ROL PORTUARIO DE LOS ANDES.
Este hecho es un llamado a estar alertas y a movilizarnos para defender el rol de comuna portuaria y logístico de la comuna de Los Andes, como el principal paso fronterizo del país y proveedor de empleos y condiciones dignas para los servicios públicos y particulares que laboran en el Puerto Terrestre. Por ello, debemos pensar y actuar como garantes de la protección del patrimonio sanitario de la Región de Aconcagua y del país. No podemos bajar la guardia y relativizar el control de carga por parte del SAG., ya que de ser así se hace patente la amenaza del ingreso de plagas como la mosca de la fruta y la fiebre aftosa, las que no están erradicadas en los países vecinos. Sólo un mejor control permite prever y detectar hechos delictuales como el comercio ilegal de armas, el contrabando y el tráfico de drogas por carteles internacionales.
Lo más probable es que nos van a responder que como la carga viene certificada en origen, sólo bastaría un control selectivo de la carga. Sin embargo la experiencia demuestra que el riesgo siempre está latente y van cambiando los métodos para burlar los controles. Basta recordar lo sucedido con el escándalo de la exportación de carne podrida y la aplicación de químicos cancerígenos que se detectó en Brasil por parte de las empresas JBS y BRF, en marzo de 2017, el contrabando de armas sorprendido en octubre de 2017 y de cigarrillos y ropa en octubre de 2018, en cuyo caso el control fronterizo del SAG, la ADUANA y la PDI fue fundamental. El Gobierno tiene el deber de dar una respuesta satisfactoria a la comunidad andina, al sector agrícola exportador y a los servicios que operan en el Puerto Terrestre de El Sauce y evitar políticas de ahorro que finalmente resultan dañinas para la región de Aconcagua.
FORTALECER A LOS ANDES, COMO UNA COMUNA ESPECIALIZADA EN SERVICIOS LOGÍSTICOS.
Cuando surgen amenazas como las denunciadas, vale la pena recordar que dicha infraestructura portuaria solucionó la crisis de espacio físico, ambiental y operativa de la antigua Aduana de Avenida Hermanos Clark, a partir de la aprobación del Plan Regulador2000, que definió como estratégica la localización del servicio de control aduanero fuera del radio urbano, específicamente en el sector de El Sauce. Inaugurado oficialmente el año 2009, por el Gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet, con una inversión de 16 millones de dólares, y en una superficie de 24,5 hectáreas adquiridas por el Gobierno Regional. A ello se debe agregar otras 10 hectáreas que ocupa el Almacén Extraportuario El Sauce, que desde el año 2010, fue autorizado para realizar inspecciones de mercancías de origen vegetal y animal. Complementario con ello, fue la habilitación del acceso desde autopista CH60 y la construcción del By Pass El Sauce. Estas obras fueron fruto de una planificación urbana que proyectó a la comuna a mediano y largo plazo, fortaleciendo su rol portuario.
Cabe señalar que en la actualidad el Puerto Terrestre atiende a cerca de 11.520 camiones al mes, la mayor parte de carga de importación, y es muy probable que el movimiento de camiones aumente en la eventualidad de aprobarse el tratado TPP-11,que es promovido por Japón, Australia, Canadá, México, Perú, Malasia, Vietnam, Nueva Zelanda, Singapur, Brunéi y Chile, todo ello a pesar del desinterés de China de integrarse y del retiro reciente de Estados Unidos, actualmente en discusión en el Congreso Nacional.
EXIGIMOS QUE EL GOBIERNO CUMPLA LA LEY Y OPTIMICE LA INVERSION EN OBRAS DEL PUERTO TERRESTRE.
Ante la denuncia planteada, exigimos que el Gobierno a través del SAG cumpla con la función que le asigna la ley 16.640, de ser el organismo público encargado de apoyar el desarrollo de la agricultura, los bosques y la ganadería, a través de la protección y mejoramiento de la salud de los animales y vegetales, para “evitar la introducción desde el extranjero de enfermedades o plagas que puedan afectar a los animales o vegetales y dañar gravemente a la agricultura”, para lo cual se han establecido los controles fito y zoosanitarios en los lugares de ingreso al país.
Desde ya expresamos nuestra solidaridad y apoyo con las reivindicaciones de los trabajadores de los servicios públicos aduaneros, del SAG, de los estibadores, que se podrían ver afectados en caso de implementarse las medidas denunciadas por parte de las autoridades de Gobierno, las que a la larga también pueden minar el rol portuario de la comuna de Los Andes y la región de Aconcagua.
