Dr. Denis Panozo V.
La piel es el órgano más extenso del organismo. Cubre los órganos internos, protegiéndolos de traumatismo, actúa como barrera que impide la entrada de microorganismos y previene la pérdida de agua y de otros fluidos. La piel regula la temperatura corporal y ayuda a eliminar el exceso de agua y sales, además produce vitamina D.
Nuestra piel posee un pigmento, la melanina que es el responsable del color, es así que las personas de piel oscura poseen mayor pigmentación en cambio las personas albinas no poseen este pigmento. Existe evidencia que este pigmento nos protege de los rayos ultravioleta de la luz solar.
El cáncer de piel se presenta con mayor frecuencia en zonas del cuerpo expuesta del sol, como cara, cuello y brazos. A nivel mundial la incidencia de este tipo de cáncer está relacionada con la latitud. Mientras más nos acercamos a la línea del Ecuador, más aumenta la radiación ultravioleta y por lo tanto, más alto es el riesgo de desarrollarlo. En resumen los factores de riesgo conocidos para la aparición del cáncer de piel están relacionados con la cantidad de radiación ultravioleta de la luz solar y características de la raza, piel clara con su incapacidad para broncearse por lo cual fácil de sufrir quemaduras e insolaciones.
La piel blanca ya no es moda, antes la tez clara era símbolo de distinción y belleza. Hoy en cambio las píeles morenas son, además de un síntoma de salud, un factor imprescindible a la hora de valorar el atractivo físico y no solo durante el verano. El aumento del uso de camas de solarium en los centros de belleza prometiendo un bronceado saludable, instantáneo e inofensivo, según la Organización Mundial de la Salud las cifras de melanoma maligno han aumentado en forma alarmante, principalmente en los países donde la población tiene la piel más clara y la cultura del bronceado está más arraigada, como Australia, Nueva Zelanda y el norte de Europa.
En nuestro país el cáncer de piel ha aumentado en los últimos años, la causa principal es el agujero en la capa de ozono, que se suma a la moda del bronceado. Por lo anterior parece fundamental que cada persona conozca su piel y pueda consultar en forma precoz en caso de lesiones sospechosas.
La mayoría de las lesiones de la piel como lunares, pecas y manchas son inofensivas, pero es difícil establecer la diferencia entre lesiones premalignas, cáncer de piel y otras condiciones de la piel, pero frente a cualquier cambio de esta pigmentaciones acudir al Dermatólogo
Hay que recordar que nuestra piel es el mayor órgano que nos causa placer.